El miércoles, a parte de ser el cumpleaños de Yuri, con toda la teatralidad que ello derivaba, era el primer día que iban a dar esa clase de tutoría compartida. Justo al terminar la clase previa el profesor, Sigure, les daba una advertencia:
- Atendedme. Se que ahora vais a empezar a dar la primera clase de tutoría compartida con los de 3-1, así que, ahora, los que tenéis que ir a la otra clase preparad un cuaderno y bolígrafo o lo que uséis y para evitar suspicacias guardar el resto de vuestras cosas en las carteras, no las dejéis a la vista porque no vamos a aceptad que luego vengáis a quejaros de que os falta algo. El mismo consejo se está dando en estos momentos en la otra clase y os lo advierto, ni se os ocurra tocar nada ¿entendido?
- ¿Que les vamos a robar? - protestó Nowaki - ¿Los apuntes?
- Vosotros no toquéis nada y evitaremos problemas. Si tenéis algo importante como el móvil que no debéis traer a clase, calculadora, mp3 o un anillo de diamantes os los lleváis ¿comprendido?
La clase de Sigure acabó y este se marchó. Los que tenían que dar clase en el aula de enfrente comenzaron a recoger sus cosas. Yuri le decía a Akira que vigilase a quien se sentase en su sitio y este se quejaba de qué porqué tendría que hacerlo con lo mal que le venía ya que ella se sentaba por detrás de él.
Antes de salir de su clase, Kamui sonrió a Akane.
- Hasta luego, Cenicienta.
Akane se giró y miró a Akira que a su vez la observaba arqueando una ceja.
- Tengo que decirle a este chico que deje de llamarme Cenicienta.
- Lo que tienes que hacer es hablar con él seriamente y decirle que le estás dando esperanzas, porque no lo estás haciendo ¿verdad?
- Tienes razón, tengo que hablar con él y dejarle todo claro.
Comenzaron a entrar los alumnos de 3-1 que iban a dar allí tutoría. Hizashi, como delegado que era de 3-2 consideró que debía vigilar que esa primera entrada fuera respetuosa por las dos partes, así que se levantó y apoyado en la mesa del profesor dirigió una mirada expectante a sus temporales compañeros y no le gustó nada lo que iba viendo. Para empezar entraban Takumi y Deisuke y un poco después Kuro, eso ya le indicaba que aquello no pintaba nada bien, era totalmente inadmisible.
Entraron en silencio y fueron observados por los de dentro. Se fueron sentando donde podían, de momento dejando todo el espacio posible entre los que hasta ahora habían sido "la clase rival".
Las que si se alegraron fueron Sumire, que al ver entrar a Kimisuke, le sonrió abiertamente mientras le hacía un gesto para que se sentase en el sitio que Jisei había dejado vacío y Momoka que miró sonriendo imperceptiblemente a Takumi.
Akira tampoco disimuló un gesto de desagrado. Estar en la misma clase que Jiro no era lo que más le agradaba aunque al menos no estaba Kyojin, pero menos le agradaba la idea de compartir horas y horas con Seishiro.
Precisamente Seishiro se detuvo unos segundos frente a Shibi sin hablar y le dedicó una burlona sonrisa mientras se colocaba las gafas.
Hikari miraba nerviosa a los que estaban allí. No estaba Kamui, eso ya lo sabía pero a cambio si esa otra chica que siempre iba detrás de él y la otra cabeza de calabaza. Así que a Kamui le habían separado de sus amores, pues parecía que ahí si que habían acertado los profesores, lo que ella temía era que le tocase con Kamui y una de ellas, tener que aguantarle babeando no lo iba a soportar.
Karasu vio entrar a Fatora y sonrió, al menos a esta la conocía y Fatora casi con miedo, mirando de soslayo a sus compañeros, le devolvió una pequeña sonrisa. Por lo demás, exceptuando a Kimisuke, a Karasu no le gustaba ni uno solo de sus compañeros.
- ¡Eh, hombrecito! - la voz de Tsuki rompió el silencio - Te digo a ti Shikamoto, a lo mejor tengo ahora oportunidad de devolverte "aquello".
- ¿Que dice esta loca? - gruñó Momoka.
- Tú calla que a ti te tengo ganas - se encaró a ella Tsuki.
- ¡Silencio! - gritó severa Nanao entrando en el aula - No empecemos tan pronto a llevarnos mal.
- No, si yo estoy deseando llevarme bien con mis nuevas compañeras - habló burlón Seiji - Sobretodo con la del pelo corto ¿No me puedo sentar a tu lado, muñeca?
- Chaval - se apresuró a contestar Kenshi - Mucho colacao tienes que tomar tu para acercarte a ella.
- ¿Que me vas a hacer, fiera?
- Lo que no te haga él lo mismo te lo hago yo - gruñó Karasu.
- ¿Que pasa? - volvió a hablar Nanao - ¿No estáis contentos con vuestros nuevos compañeros?
- No, para nada - contestó Kenshi.
- ¿Quien te molesta? A ver, di alguien en concreto.
- Para empezar esos dos de ahí - señaló a Deisuke y Takumi.
- No señales, es de mala educación - respondió Deisuke.
- A lo mejor preferías que estuviesen con Kohaku - comentó Nanao - ¿Es eso, Kenshi?
- Que pena - susurró Deisuke a Takumi - No estamos con la princesa.
- ¿Acaso creías que la dejarían con nosotros?
- Hubiera estado más divertido.
- Bueno, tampoco está tan mal - dijo mirando a Momoka.
- Nanao, esto no va a salir bien - habló Hizashi.
- Siéntate y tranquilízate. Si todos colaboramos podemos conseguirlo.
- Pero es que...
- ¿Es que, qué?
- Mira, mira - habló Seishiro con cierta ironía - El niño estirado tiene una rabieta.
- No contestes Hizashi - advirtió la profesora - ¿Es que aquí a nadie le cae bien nadie?
Silencio absoluto
- ¿Nadie, nadie?
- Hombre - contestó al fin Sumire - A mí me cae bien Kimisuke.
- A la nena le gustan los traidores ¡que cosas! - se burló jocosamente Kuro.
- ¿Por qué no te metes las lengua en el...? - comenzó a decir despectiva Akane.
- ¡Akane! ¿Que expresión es esa? - gritó a su vez sin dejar de terminar Nanao.
- Lo siento - Akane se levantó - No se que me ha pasado. Lo siento - y volvió a sentarse.
- Creo que estamos todos demasiado nerviosos - comentó Nanao - Creo que esta hora se nos va a hacer muy larga.
La entrada a la clase de 3-1 no había sido mucho más agradable.
El primero fue Nowaki, se colocó las manos en las caderas y miró a sus nuevos compañeros que, curiosos y también en silencio, les esperaban.
- Venga hombre, entra - le dijo Ebisu, el tutor de aquella clase.
Nowaki no lo veía demasiado mal del todo, no era amigo de ninguno exceptuando a Yuko, esa chica le caía muy bien; pero bueno, estaban Setsu y Shugo que eran amigos de Kamui así que lo mismo conseguía hasta llevarse bien con ellos, Taro, el primo de Kamui, que parecía algo tontito, los pardillos de Dosu y Zenko que se creían algo pero no eran nada, el desquiciado de Reiji y el único que le preocupaba: Nagato, claro que estaba seguro de que si hablaba con él a lo mejor hasta se podían comprender. En cuanto a las chicas, estaban ese par de pijas, Stella y Kikyo, Yuya y Kanna... tampoco era tan tremendo como lo había imaginado.
- ¡Eh, primo! - saludó haciendo aspavientos Taro - ¡Estás junto con Taro! ¡Que suerte!
- Pero mira quien viene, la rubita guarrilla - dijo riendo Dosu.
- Y la dulce Himeko - añadió Reiji - Esto si que es suerte, el curso se pone de lo más "calentito"
- Reiji - advirtió Ebisu - Un comentario de ese tipo más y te quedarás a limpiar el patio.
- ¡No jodas!
- Reiji, solo te lo diré una vez: no voy a consentir ni un comentario despectivo hacia nadie, ni humillante, ni tampoco ese vocabulario y eso va para todos.
- Procura mantenerte alejado de las chicas - dijo con una enorme frialdad Kohaku - Si no, no me hago responsable de lo que te pase.
- ¡Uy que miedo!
- Kohaku déjalo - intervino Ebisu - Aquí nadie se va a tomar la justicia por su cuenta ¿Entendido? Eso si, cualquier acoso verbal o físico hacia alguna de las chicas o incluso solo insinuación va a ser castigado duramente.
- Me gustaría saber - habló Nagato a sus propios compañeros - Por qué os comportáis así.
- ¿Así, cómo? - interrogó Zenko.
- Durante estos meses os habéis comportado pasando de todo, es venir estas chicas y os ponéis a decir barbaridades.
- Es cierto - confirmó Stella - Ahora esta gente va a pensar que somos así, estáis dando una imagen pésima, nosotros nunca nos hemos comportado de una forma tan desagradable.
- Uy mira la señorita pija se ofende - se burló Yuya.
- Por favor - se quejó Stella - ¿Por qué tengo que soportar esto?
Ryuko agarró la mano de Kyojin y apretó. Ese gesto fue visto por Karura que estaba detrás de ella.
- No tengas miedo - le susurró - Estos hablan mucho pero se les va toda la fuerza por la boca.
- ¿Que murmuras, guapita? - habló en voz alta Yuya - Si tienes algo que decir dilo claro, ahora somos compañeros.
- Tú mantén esa boquita cerrada.
- ¿Me la vas a cerrar tu?
- Pelea de gatas - se oyó decir a Setsu - Esto se pone interesante ¿Hacemos apuestas?
- ¡Vale! - cortó Ebisu - Sentaos de una vez. Los profesores estuvimos analizándoos a todos vosotros y haciendo montones de combinaciones y por mis... narices que esto va a salir bien, por las buenas o por las malas, así que empezad a morderos la lengua antes de hablar.
A Jisei lo que no le gustaba era que estaba allí esa petarda de Kikyo, su ex-amiga, esa que decía que eran tan amigas y luego resultó más falsa que nadie, mírala, allí estaba riéndose a escondidas y cuchicheando con la reina de las Barbies, a saber de que tontería se estarían riendo.
Por el contrario Yuri parecía contenta, seguramente, pensaba Karura, porque le encantaba ser el centro de atención y tener a chicos diciéndole lo buenísima que estaba aunque fueran tan desagradables como Reiji.
Himeko miró a todos y respiró hondo, ninguno iba a conseguir acobardarla, estaba decidida a no comportarse como una cobarde asustadiza, de eso nada, iba a demostrar a todos y sobretodo a Nowaki y Kohaku que podía hacerlo, no era tan terrible, no estaban ni Takumi, ni Deisuke, a los que no quería ver muy cerca de ella, las indirectas o directas que pudieran decir Reiji, Dosu y Zenko no la asustaban porque sabía que solo eran trabucadas.
- A ver chicos - decía Nanao en su clase - Lo primero que vamos a hacer es conocernos. Es importante conocernos porque a mi me da la impresión de que muchos de vosotros ni siquiera os conocéis, os tenéis manía solo por costumbre.
- ¿Y qué vamos a hacer? - comentó a modo burla Kuro - ¿Nos vamos a presentar y a decir nuestros sueños?
- Tu para empezar va a callarte y a mostrar mas respeto cuando habla tu profesora - gruñó Nanao - Bien, comos sois 21 vamos a hacer 7 grupos de tres personas. Quiero que todos vosotros me presentéis un trabajo sobre los dos compañeros que os van a tocar, quiero que habléis entre vosotros y averigüéis todo lo posible de vuestros compañeros, su familia, sus amigos, lo que le gusta hacer y lo que no, sus aficiones, sus sueños, sus costumbres y hasta si averiguáis cual es la marca de su pasta de dientes, todo. Cuanto más extenso sea el trabajo que me presentéis más puntuación os daré.
- ¿Y de que nos sirve la puntuación? - habló Seiji - Si esta clase no es una asignatura.
- Es que no me has dejado terminar. Se os darán puntos que se transformarán en positivos para el resto de las asignaturas y se repartirán como vosotros escojáis, por cada tres positivos podréis subir medio punto en la nota de vuestros exámenes - Nanao, como era habitual en ella guardó unos segundos de silencio esperando que los chicos comentaran aquello - A ver, os lo explico mejor. Si por ejemplo tu, Seiji consigues 40 puntos eso serán 40 positivos que podrás repartir entre las asignaturas que quieras y supón que en el último examen de Matemáticas sacaste 4,5 pues si utilizas tres de esos positivos la nota de ese examen subirá a un 5 ¿Lo habéis comprendido?
- ¿Y los podremos repartir como queramos? - preguntó Genki.
- Si, como queráis y cuando queráis. Cuantos más puntos obtengáis más positivos.
- ¡Pero eso es un chollazo! - exclamó - Tsuki.
- No lo veo justo - comentó Momoka - No veo justo que yo me esfuerce por aprobar una asignatura y otro está haciendo el vago y solo por acumulación de positivos pueda aprobarlo. No es nada equitativo.
- No te creas que van a ser tan fácil conseguir puntos, además por mala conducta también se os podrán quitar.
En la otra clase los comentarios eran prácticamente los mismos.
- Bueno - decía Ebisu - Voy a decir los grupos. No quiero protestas, ni que vengáis diciendo que a fulanito le ha tocado con un amigo y a vosotros con dos que os odian o cosas así. Se ha hecho teniendo en cuenta muchas cosas pero aún así, si no estáis contentos, escucharé vuestras quejas. Vamos allá. Kyojin, Nagato y Reiji. Los siguientes, Karura, Kanna y Yuko.
- ¿Es que vais a poner chicas con chicas y chicos con chicos? - preguntó Stella.
- No, hay de todo. Siguientes, Kohaku, Setsu y Taro. Podéis ir sentándoos ya juntos. Sigamos, Nowaki, Yuri y Zenko.
- ¡Rubita! ¡Que nos ha tocado juntitos! ¿Me vas a decir como duermes?
- Te lo advierto Zenko - habló severamente Ebisu - Un comentario más y ya empiezas perdiendo puntos y si perdéis puntos se convierten en negativos y lo mismo, al igual que los positivos pueden subir la nota los negativos la bajarán.
- ¡Vaya una mierda! - protestó Yuya - Bueno lo siento ¿vale?
- Sigamos, Jisei, Kikyo y no protestes que te conozco, Yuya.
Yuya no protestó pero no fue por falta de ganas. Se levantó de mala gana para acercarse a "esa porquería de grupo" que le había tocado.
- Lo siguientes, Ryuko, Kamui y tampoco protestes, Stella y claro ya los que quedan, Shugo, Himeko y Dosu.
Himeko miró asustada a Kohaku y a Nowaki.
- Perdón profe - levantó la mano Nowaki - Pero creo que ese grupo no está muy bien elegido.
- No te preocupes - le interrumpió Shugo - Yo me ocuparé de que Dosu no se acerque ni ofenda a Himeko.
- No, no pasa nada - dijo con miedo Himeko, la verdad es que Dosu le era de lo más desagradable pero estaba dispuesta a demostrar que no era una débil princesita a la que siempre había que proteger.
Nanao, como siempre, esperaba a crear la expectación suficiente en sus alumnos antes de decir los grupos.
- ¡Venga, dilos ya! - se impacientaba Kenshi.
- Está bien, vamos allá. Empezamos por Hizashi, Kenshi y Deisuke.
- No - habló alto y claro Hizashi - Con todo el respeto, no me puedes poner a mí en el mismo grupo que Deisuke.
- Pues si puedo y lo hago. Precisamente porque os odiáis, quizás así aprendáis algo el uno del otro, algo que os sorprenderá. Sigo, el siguiente grupo lo forman Momoka, Takumi y Jiro.
Momoka sonrió satisfecha, que suerte que había tenido, ahora si que podía acercarse a Takumi sin problema, era su compañero de grupo y se suponía que tenía que averiguar todo de él.
- Siguiente grupo, Xu-Xu, Tsuki y Suo. Seguimos, Sumire, Seiji y Karasu.
- Vaya, vaya ¿qué te parece muñequita?
- A mi me parece que te puedo partir la boca como te pases un poco - gruñó Karasu.
- Está bien Karasu, no te alteres - habló la profesora - A Seiji no le interesa mucho que empiece a quietarle ya puntos ¿A que no? Sigamos, Akira, Hikari y Seishiro.
Se oyó como Akira golpeaba la mesa al dejar un bolígrafo.
- ¿Algún problema Akira?
- Si, todos los del mundo ¿No había otro con quien ponerme?
- No, no había otro.
- ¿Luego puedo protestar?
- Si, luego puedes protestar pero piensa que a lo mejor el cambio va a ser peor.
- Ya sabes lo que dicen, Shikamoto - habló cínicamente Seishiro - Ten a tus amigos cerca pero a tus enemigos más cerca aún.
- Dejad esa charla para luego que tenemos prisa, siguientes, Genki, Akane y Fatora y ya pues los restantes, Kuro, Shibi y Kimisuke. Y ahora poneos en grupitos y comenzar a conoceros.
- ¿Y para cuando hay que presentar este informe? - se interesó Momoka.
- Para cuando queráis, pero cuanto antes lo presentéis más puntos obtendréis.
- ¿Y hoy no vamos a hacer otra cosa? - volvió a preguntar Momoka.
- No, hoy bastante tenemos con aclimatarlos a todo esto.
...
Al acabar la clase, Hizashi se acercó a Momoka llamando su atención.
- ¿Qué quieres?
- ¿Qué te traes con Takumi? - le dijo cruzando los brazos delante de su pecho.
- Nada - Momoka empezó a ponerse nerviosa, no sabía que decir, no se atrevía a decir que empezaba a hacerse amiga de él y nunca había sido demasiado buena mintiendo, sobretodo a Hizashi que cuando te miraba con esa severidad eras capaz de decirle lo que fuera - Es que ya ves que nos ha tocado juntos en el trabajo.
- Si, si pero esto viene de antes, llevo toda la semana viéndoos como muy amiguitos.
- Bueno es que el viernes fue al club de tenis y perdí y bolso y él lo encontró.
- Muchas confianzas tenéis ahora ¿no?
- Bueno... es que le he conocido un poco más y...
- ¿Te tengo que recordar que es una mala persona?
- No le conocemos Hizashi, no podemos juzgar a las personas sin conocerlas.
- ¿Drogar a Himeko es de buena persona?
- Sobre eso...
- Sobre eso, nada ¿Y que me dices de Yuri? ¿De que va?
- Mira Hizashi tú no lo vas a comprender, son muchas cosas y... y no me parece bien que te comportes así. Precisamente para eso nos han puesto en grupos, para que no hablemos sin conocimiento.
- ¿Cómo dices?
- Nunca hemos hablado con ellos y no sabemos porqué hicieron aquello ¿No te has parado a pensar que fue algo muy raro?
- Momoka, entiendo que quieras despegarte de Kamui, entiendo que quieras cambiar de amigos, pero ¿Takumi? Estás saliendo de la sartén para caer en el fuego.
- Hizashi, por favor, solo te pido que... se lo que hago. De momento Takumi se porta bien conmigo.
- Ya.
- Es cierto. Te prometo que estoy alerta, solo quiero...
- Mira, haz lo que quieras, se que no voy a convencerte de nada y cuanto más me oponga más cabezota te vas a poner tu, pero que conste que te voy a estar vigilando. No me gusta Takumi, no me gusta Deisuke y no me parece bien esas confianzas que Yuri y tú tenéis con ellos. No son buena gente.
- Y nosotros no les conocemos.
- Hasta hace dos días le he visto tratar a Fatora bastante mal, creo que eso me dice bastante de como es.
- Mira Hizashi, te agradezco tu preocupación, se que lo haces para protegernos pero... esto es algo que tengo que hacer, si me voy a dar de boca contra el suelo será porque me lo merezco. Siempre he estado detrás de Kamui y siempre he intentado ser una chica buenecilla y hacer todo lo correcto pero ya estoy harta de ser tan moralmente correcta. Voy a arriesgarme.
- No me parece apropiado lo que haces.
Momoka iba a contestarle cuando el timbre de la clase sonó y Hizashi, sin decir una palabra más se dio media vuelta para volver a su asiento. Sabía que no la iba a comprender e incluso seguramente terminaría por ganarse su antipatía... la suya, la de Kohaku, Karasu... y Nowaki. Esa si que le dolía ¿Cómo podría hacerles comprender que Takumi no era el ser mezquino que ellos pensaban? Ya podía hacer algo muy bueno porque borrar de sus memorias el asunto con Himeko no iba a ser nada fácil. Se acordó de Jisei, ella siempre se quejó de que después de los incidentes del año pasado todo el mundo parecía aceptar a Kamui y querer darle otra oportunidad y sin embargo juzgaban a Kimisuke sin escuchar y sin que este pudiera defenderse... ella la primera. Sí, era la que más le decía que se apartase de ese chico ¿Pero como podía ser tan estúpida y pretenciosa? Claro, si es que no tenía ojos salvo para Kamui ¿Siempre habría dado la misma imagen de patética? No se extrañaba ahora de que hubiese gente que la tuviese tanta manía.
...
- ¿Qué te pasa Kohaku? - decía Himeko - Estas como distraído.
- Perdona es que pienso que debería ir a protestar por el grupo que te ha tocado en tutoría.
- No, no, no lo hagas. En todo caso debería ser yo la que protestara, no tú y vamos a esperar a ver que pasa. A mi me preocupa más Hizashi, le ha tocado con Deisuke.
- Eres un ángel Himeko.
- No... no digas eso.
- Pero es que es cierto, siempre estás pendiente de todo lo que te rodea.
- No tiene mucho mérito, solo es que a veces pienso que no hago lo suficiente por mis amigos, querría ayudarlos más. Como Nowaki, últimamente se que pasa algo y me duele ver como intenta actuar con normalidad.
- ¿Lo dices porque ha roto con Xu-Xu?
- Es que se oye por ahí que Xu-Xu le dejó porque a él le gustaba Yuri.
- ¿Estás preocupada por Nowaki?
- Pues si. Nowaki es muy buena persona y no tiene maldad ninguna y lo peor es que no se da cuenta de que hay gente con malas intenciones.
- Estás muy preocupada por Nowaki - dijo seriamente.
- No más que por otros amigos.
Kohaku no contestó, se limitó a mirarla lleno de pena ¿Sería posible que aún sintiese algo por Nowaki? Es que hacía muy poco tiempo desde que se declaró a Nowaki y ella estaba enamorada de él y los sentimientos no se olvidan tan fácilmente ¿Quedará algo en Himeko aún?
Himeko pareció leerle el pensamiento y casi con miedo puso su mano en la mejilla del chico.
- Kohaku no... no estoy todavía enamorada de Nowaki, solo es mi amigo, le tengo mucho cariño y no quiero que le hagan daño. No soporto pensar que mis amigos pueden pasarlo mal, no quiero imaginar que alguien hace daño a Nowaki, él no se lo merece pero...
Kohaku puso su mano sobre la de Himeko suavemente, la levantó de su mejilla y depositó un pequeño beso en la palma.
- Lo siento, no quería que te dieses cuenta de que me ponía celoso.
- ¿Te pusiste celoso?
- Solo me dio un poco de pena.
Kohaku quería saber como poder explicarse, como decirle a Himeko lo importante que para él era, que cuando las pesadillas volvían a él, estar a su lado era lo que más conseguía calmar su alma.
...
- ¡Akira! ¡Kyojin! - les llamaba Yuri a la salida del instituto
Estos, que estaban con Akane, Jisei, Ryuko y Sumire la miraron.
- No olvidéis venir a merendar a mi casa esta tarde.
- ¿A merendar? - preguntó Kyojin extrañado de que dijese "a merendar" porque eso implicaba que habría comida ¿Comería Yuri?
- Si, mi madre os invita.
- ¿Pero no vas a hacer una fiesta el sábado? - se quejó Akira.
- Pero a vosotros os invita esta tarde.
- Pues que bien - murmuró Akane.
- Ryuko, tu también puedes venir - dijo Yuri - Le diré a mi madre que eres la novia de Kyojin y no habrá problema.
- ¿Y puede ir también Akane? - preguntó Sumire - Ella está saliendo con Akira.
- ¡Sumire! - gruñó esta.
- ¿Qué pasa?
- ¿Ah pero estáis saliendo de verdad? - se interesó Yuri.
- No puedo ir a tomar merienda a ningún sitio - contestó huraña Akane - Tengo que ir a trabajar.
- Bueno pero tu si ¿verdad Akira?
- Yuri - replicó este con paciencia - No me vas a convencer para hacer una fiesta en mi casa.
Después de unas cuantas frases más Yuri se marchó con Stella y Kikyo y ellos emprendieron la marcha.
- ¿Le has comprado un regalo, ciervito?
- Mi madre lo ha hecho por mí. Es un rollo pero tengo que ir, es como de la familia, seguramente irán mis padres y Chiharu.
- Y los míos - añadió Kyojin - ¿De veras no quieres ir, Ryu?
- No, no. Me sentiría muy incómoda.
- Bueno yo me voy por aquí - dijo Akane con visible mal humor - Tengo que recoger unas cosas de la tintorería para mi madre.
- Yo te acompaño - dijo Ryuko.
- Y yo - también dijo Jisei - ¿Nos acompañas, Sumire?
- Claro, claro. Bueno chicos, hasta luego.
- Hasta luego Akane - dijo Akira - Te recogeré como siempre.
- ¿Podrás?
- Claro que podré, si no puedo mi madre es capaz de caparme.
- Lo digo por lo de la merienda en casa de Yuri.
- Ah, es un verdadero rollo pero no creo que dure tanto, además así tendré una excusa para irme.
Akira y Kyojin vieron marcharse a las chicas.
- Akane parecía molesta - comentó Kyojin.
- Si que lo estaba, si ¿Por qué estaría ahora enfadada? ¿Qué le he hecho?
- No me hagas mucho caso pero yo diría que esta algo celosa.
- ¿Celosa?
- De Yuri.
- Menuda tontería.
- Para ti será una tontería porque Yuri es como de tu familia pero para ella es una rival.
- ¿Tu crees?
- Desde luego Aki que para ser tan listo no te enteras de nada.
Sumire estaba deseando decir una gran noticia a sus amigas.
- Es que no quería decirlo delante de los chicos pero esta tarde viene Suo a mi casa - comunicó emocionada - ¿No lo entendéis? Ha quedado con Misaki, dice que para que Misaki le explique las inecuaciones.
Las chicas emitieron unos ruiditos llenos de excitación.
- Ahí hay tema, te lo digo yo - decía Akane.
- Parece que va por buen camino - añadía Jisei.
- ¿A que si? - hablaba nerviosa Sumire - Si es que son muy monos, no es porque sea mi hermano pero es muy mono.
- Si que es mono tu hermano - añadía Akane - Si no fuera porque no le gustan las chicas yo intentaba algo con él - Jisei le propinó una de las collejas que habitualmente le daba a Karasu - ¡Ah! ¡Que bruta que eres! ¿Que pasa? A mi me parece mono, si yo fuera un chico no me lo pensaría mucho - Jisei repitió la colleja - ¡Ya vale! Joline, una no puede decir ni una opinión.
- Esa no te la he dado por lo que has dicho, si no por tu aura.
- ¿Ahora que le pasa a mi aura?
- ¿No estarás pensando algo pervertido con mi hermano? - Sumire la miró entrecerrando los ojos.
- ¡Que porras voy a estar yo pensando en tu hermano!
- No, si no es por lo de ahora, es que acabo de acordarme de antes, cuando estábamos con Akira.
- ¿Estaba pensando cosas pervertidas con Akira? - rió Ryuko.
- Peor que eso... estaba celosa.
- ¿Celosa yo?
- Si tu, celosa, celosa. Tienes celos de Yuri, no lo niegues.
- Es fácil sentir celos de Yuri - admitió Ryuko - Es tan guapa y ahora está aún más guapa con ese corte de pelo.
- ¡Anda la otra también! - gruñó Jisei - Pero que los sientas tu no me extraña, siempre te estás quejando de tu físico ¡pero Akane!
- ¿Tienes celos de Yuri? - preguntó Sumire.
- No son celos es... rabia, es... miedo...
- ¡Ah! - gritó de pronto Sumire - ¡Tienes miedo de que te lo quite Yuri! ¿Es eso? Si, si es eso ¿A que si?
- Pues entonces tiene fácil arreglo - intervino Ryuko - Y Akane sabe lo que tiene que hacer.
Jisei miró fijamente a Akane y esta desvió la suya al suelo.
- Creo que lo haré esta noche, cuando venga a recogerme - dijo en voz baja.
- ¿El qué? - gritó Sumire.
- Tienes que hacerlo - dijo Jisei.
- Ya estás tardando - añadió Ryuko.
- Retrasarlo más o negarlo es una verdadera tontería - afirmó Jisei.
- ¿Pero el qué? - gritó de nuevo Sumire.
- Le diré a Akira que... bueno, ya sabéis el qué.
…
- ¡Malditos crios! - gruñía Nanao entrando en la sala de profesores.
- ¿Que te pasa ahora? - comentaba Akemi sentada frente a la mesa principal mientras terminaba de guardar unos papeles.
En la sala además estaban los profesores Yotsuda, Sigure y Masashi.
- Los de 3-2, esto de las clases compartidas va a ser más difícil de lo que parece.
- ¿Se han puesto muy negativos? - se interesó Yotsuda.
- El problema es que ni un grupo, ni el otro quiere colaborar, no ponen nada de su parte.
- ¿Quieres que hable con algún alumno? - habló Masashi.
- No vendría mal que les vigilásemos un poco - añadió Sigure.
- Perdón - oyeron golpear la puerta con los nudillos y todos miraron para ver a Hizashi delante de ella.
- ¿Si? - contestó Sigure - ¿Querías algo, Hizashi?
- Si, bueno es que el otro día Nanao me propuso si quería formar parte de los alumnos tutores.
- Es verdad, lo hice. Hizashi es buen alumno y es muy disciplinado - explicó a sus compañeros - Le dije que podría apuntarse como voluntario a dar clases a chicos que necesitan refuerzo.
- Ah pues si - dijo Masashi - Es muy buena idea.
- Además a ti te ayudará y beneficiará a tu expediente - añadió Yotsuda.
- Es por eso - continuó Hizashi - Es que quería saber donde me puedo apuntar.
- ¿Entonces te quieres apuntar? - indicó Masashi - Eso es estupendo. Ven, vamos al despacho de orientación y te hago una ficha, no es mucho, más que nada para saber que disposición tienes. Bueno, nos vemos luego.
- De acuerdo Masashi, hasta luego - le despidieron.
- Me alegra que Hizashi quiera colaborar - comentó Akemi cuando se hubieron marchado - Ha mejorado muchísimo en su actitud.
- Si - corroboró Yotsuda - ¿Os acordáis cuando era un chico solitario?
- Sigue siendo solitario, pero no tanto - indicó Sigure - Se ha abierto bastante y por suerte he dejado de humillar a su prima.
- Será que va madurando - reflexionó Akemi - Ser adolescente es muy complicado aunque este chico siempre fue complicado.
- Eso lo dices porque no deja que sus sentimientos influyan en sus decisiones - habló Sigure - A saber lo que pasará por su cabeza.
- ¿Que tal la mañana? - dijo Chikara, la directora entrando seguida de Shinobu - Ha estado bien movidita ¿verdad?
- Bastante - respondió Akemi - He tenido que ordenar todos los exámenes médicos y eso que esta vez no les hemos hecho análisis de sangre.
- Dímelo a mi - añadió Shinobu sentándose pesadamente en una de las sillas - Por cierto Akemi ¿Has visto ya el expediente de Yuri Hanakiri?
- Claro, por supuesto y ahora voy a llamar ya a sus padres. Este tema no lo podemos dejar correr ni un minuto más.
- ¿Los llamas tu o prefieres que lo haga yo? - preguntó Chikara.
- Lo haré yo, si los llamas tu se alarmarán más y lo mismo la chica se pone más en alerta.
- De acuerdo, pero hazlo hoy sin falta. A ver si puede ser que vengan mañana mismo a hablar contigo.
- Pobre chica - comentó Nanao - Es una verdadera pena.
- Sobretodo porque ha sido una alumna ejemplar hasta ahora - afirmó Yotsuda - De las mejores. Ella subía la media de toda la clase.
- Y la mejor trabajando en grupo - añadió Sigure.
- Es lo que suele pasar - habló Yotsuda - Es por su afán de perfeccionismo en todo.
- Pues tenemos que ayudarla - fue rotunda Chikara - Hay que convencer a sus padres para que visiten a la psicóloga cuanto antes ¿Y Masashi? ¿No estaba aquí?
- Ha venido un alumno que quería hablar con él - contestó Nanao.
- Espero que no tarde mucho. Le dije a mi hermano que le llevaría a su casa esta tarde, está deseando verle, son amigos desde hace años.
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