lunes, 14 de noviembre de 2011

49. La jornada previa a la guerra

Según iban terminando el desayuno, cada grupo fue llevado a distintos lugares. Todos los grupos tenían que realizar unos circuitos de ejercicios, para todos eran los mismos, aunque para que no se juntaran hacían recorridos distintos. Tablas de ejercicios es tierra, pesas, bicicleta y cintas, carreras, escalada, saltos, circuitos americanos...
Los ejercicios fueron duros y los mantuvieron lo suficientemente ocupados como para impedir que discutieran entre ellos, al menos no demasiado, alguna que otra indirecta dicha con malicia… sobretodo en el equipo de Karasu por parte de Seiji y Zenko que hacía saltar al primero.
Así pasaron toda la mañana hasta la hora de la comida, que fue bastante tarde. En la comida no hubo incidentes, estaban lo suficientemente cansados como para no discutir, de hecho hablaban más bien poco.
Los profesores estaban todos sentados en la misma mesa.
- ¿Cómo ha ido todo? - preguntó la directora.
- Después de esto se pensarán el volver a atacarse - respondió Ebisu.
- ¿Que tan vuestros equipos? Vamos a hacer un repaso. A ver Gaito, empieza tú.
- Son unos chicos estupendos, no tengo quejas de ellos. Hay tres de cada clase, Momoka y Takumi evitan hablarse, es lo más tirante que hay pero por lo demás trabajan bien, no como grupo, me refiero a nivel individual; Momoka, Suo y Xu-Xu se apoyan entre ellos, luego Hikari y Shugo también cooperan con ellos aunque mantienen una actitud algo fría.
- Bueno, no está muy mal. ¿El tuyo, Nanao?
- También es bueno, están el loco de Nowaki y el impulsivo de Genki que son los que animan y arrastran a los demás a participar, se encargan de levantar el ánimo y es un gran trabajo. Luego está Ryuko, es la más débil de todos pero estos dos están apoyándola continuamente. Hizashi, Kanna y Kimisuke ponen el toque maduro al grupo. No trabajan mal como equipo aunque por supuesto, nunca lo reconocerán.
- Son uno de los equipos a tener en cuenta. A ver tus niños Inari.
- Mis hombretones, que son todos unos machos. Pues echamos de menos alguna presencia femenina que dulcifique el ambiente, la verdad. Hay mucha tensión, sobretodo entre Kohaku y Deisuke, en cuanto se miran se puede ver el odio en sus caras. Es bastante violento. Luego está Shibi, el único compañero de Kohaku, pero no habla mucho, se limita a observarlos, es algo desconcertante. Setsu arma mucho revuelo, es bastante competitivo y Kuromaru y Dosu fanfarronean mucho, creo que las narices de los demás están empezando a hincharse. No somos un buen equipo, no trabajan juntos, ni se relacionan.
- ¡Vaya por Dios! A ver, tú turno Ebisu.
- Tampoco estoy contento, sobretodo porque no considero apropiado tener a Himeko Girei de pareja con Seiji. Ese chico es bastante desagradable, deberíamos pensar en cambiar a esa chica, lo está pasando realmente mal.
- Si, creo que tienes razón, es la pareja más desafortunada de todas. Ahora lo examinaré, continúa.
- Luego tenemos a Zenko, él y Seiji se han aliado para meterse con las chicas y hacen la convivencia muy difícil. Karasu, el único chico de 3-2, se lo toma todo bastante mal, está muy nervioso y da lugar a muchas reacciones violentas. Las chicas bueno, más lo menos lo llevan, se sienten algo cohibidas, sobretodo Himeko. No es un equipo nada equilibrado. Parece que la joven Yuri se sienta alagada de atraer la atención de los chicos y a veces se comporta de forma algo... cizañera.
- ¿Crees que está malmetiendo al grupo? - se interesó Masashi.
- Seguramente no lo hace aposta - intervino Yotsuda - Hanakiri no tiene mala intención, solo le gusta llamar la atención.
- Si, será eso - continuaba Ebisu - Lo que ocurre es que Seiji y Zenko son de gatillo fácil y luego está Fatora que ha decidido no relacionarse con nadie, creo que odia a todos sus compañeros. En resumen, no estoy muy contento.
- Bien, veré luego que podemos hacer ¿Y tú Akemi?
- Bien, mi equipo bien, muy divertido. Solo tenemos un chico, Kenshi, al que vamos a volver loco. El pobre es el blanco directo de todas las burlas, de esta terminará directo en el psicólogo. Karura se lleva fatal con Yuya y Tsuki, no paran de lanzarse indirectas, creo que van a terminar por sacarse los ojos, pero bueno están Jisei y Sumire para limar asperezas. De 3-1 solo están Yuya y Tsuki pero creerme que no hacen falta más. No me quejo, la competitividad entre chicas las motiva a trabajar más.
- Si tú lo dices... A ver el tuyo, Yotsuda, es el de los Kaguya ¿no?
- Si. Bueno, no es un equipo malo. Kikyo protesta muchísimo, todo le parece una tortura; Jiro habla poco, más que nada mira mal; Reiji está como su hermano... desquiciado; Taro pone el toque de humor y relaja el ambiente, es más listo de lo que parece y en cuanto al otro Kaguya ¡que os voy a decir! Parece molestarle trabajar en equipo pero demuestra un inusual interés por su compañera de clase, que es la única, está muy pendiente de ella, no deja que Reiji se le acerque... es como muy protector.
- ¿Es Kumoyuki, no? ¿Que tal se porta?
- Bien, la verdad es que intenta integrar a todo el grupo y organizarlos. En conjunto no hacen mal equipo.
- Bueno, y por último el de Sigure.
- ¿El mío? No se que decirte, debería estar contento, tengo a tres de los mas inteligentes pero no me motivan mucho; uno se pasa el día quejándose y no hace nada con ganas, otro pasa de todo y hace lo que le da la gana y el tercero parece más interesado en observar a los otros grupos.
- ¿Quienes son?
- Por orden, Akira, Nagato y Seishiro. Luego tengo a Stella, os podéis imaginar, no para de quejarse, según ella todo es vulgar y barriobajero y amenaza con quejarse a su padre. Kyojin y Haku parecen mantenerse al margen de todo. No forman un equipo muy unido.
- Entonces - habló Masashi - ¿Por quien apostáis?
- El que más posibilidades parece tener es el equipo de Yotsuda - contestó Inari - No olvidéis que tiene a los dos Kaguya.
- Si - añadió Sigure - Deberíamos haber tenido en cuenta esa eventualidad, ahora Yotsuda tiene dos ases en su manga.
- ¿Pero creéis que trabajaran bien juntos? - se interesó Shinobu.
- Lo que yo se y estoy seguro - dijo Gaito - Es que esos dos serán capaces de olvidarse de sus prejuicios con tal de ganar.
- No creas - negó Yotsuda - Nanao tiene un equipo muy bueno. Hizashi y Kimisuke juntos pueden ser tremendos...
- ¡Pues no creáis que el mío os lo va a poner fácil! - rió Gaito.
- Todos tienen posibilidades - medió Shinobu.
- Vale, pues vamos a solucionar el problema de Himeko Girei. Podíamos cambiarla por Kenshi, así tu equipo sería solo de chicas ¿que te parece Akemi? - propuso la directora.
- Mejor mándala a mi grupo - se apresuró a hablar Inari - Que somos una panda de burros, al menos una chica nos dará algo de humanidad.
- Mi equipo está bien - explicó Akemi - Kenshi en el fondo se divierte, por él no lo hagas.
Chikara abrió una carpeta y estuvo mirando detenidamente las listas.
- ¿Quieres que te quite a Nagato o Seishiro?
- Bueno, como quieras - replicó Sigure.
- El equipo de Gaito y de Nanao son bastante equilibrados - parecía reflexionar la directora en voz alta - Preferiría no tocarlos.
- Himeko es una chica dulce a la que le cuesta sacar lo mejor de si misma - decía Akemi - Pero es muy fuerte y decidida y no se rinde fácilmente ante las adversidades. Si la cambias por Nagato se sentiría cómoda con Akira y Kyojin y Ebisu tendría un líder claro.
- Pero rompería el equilibrio de mi grupo - respondió este - Es escaso pero lo hay. Nagato no se lleva bien con Karasu, ni con Seiji, ni con Zenko. Creo que los tres lo verían como una amenaza.
- La otra idea que se me ocurre es cambiarlo por Setsu ¿Que te parece, Inari?
- ¿Setsu? Sería mejor separar a Deisuke y Kohaku pero... bueno, no me desequilibra demasiado el grupo.
- Se sentiría protegida con Kohaku y Shibi - añadió Yotsuda - Pero no olvides que en ese grupo está Deisuke y lo que pasó les relaciona directamente.
- ¿Cómo se han llevado Kohaku y Setsu? - preguntó la directora a Inari.
- Se han ignorado el uno al otro.
- ¿Y Nagato y Seishiro? - interrogó ahora a Sigure.
- Bueno, ya sabes, no se aguantan, ambos son los cabecillas de sus grupos. Si lo que pretendes con esta convivencia es que trabajen juntos no deberías separarlos.
- Eso es cierto... Shinobu ve y pide un par de pulseras marino y verde, anda.
La directora se levantó y golpeó un vaso con uno de los tenedores.
- Vamos a ver - habló en voz - Atendedme. Después de estar observándoos toda la mañana y viendo vuestro rendimiento...
- ¡Nos vas a dar el día libre! - exclamó eufórico Nowaki.
- No, y no interrumpáis. Nos hemos dado cuenta e que uno e los grupos tiene un fallo, así que vamos a hacer un cambio.
- ¿Que fallo? - preguntó Kenshi - ¿El mío?
- Eso a vosotros no os importa. Veamos, verde1a y verde1b y también marino2a y marino2b, que vengan aquí.
Himeko, Seiji, Kohaku y Setsu se acercaron perplejos. Inari, con una especie de tijeras especiales cortó las pulseras de los cuatro, mientras Ebisu activaba las nuevas que había traído Shinobu.
- ¿Cómo estas Himeko? - le preguntó la directora mientras Inari le colocaba la nueva pulsera azul marina - Cambia tu chapa y tu pañuelo con los de Setsu, ahora vas a ser marino2a.
Himeko miró con evidente alegría a Chikara, a Inari y a Kohaku.
- Bienvenida la grupo - sonrió Inari - Se agradece tener una chica entre nosotros.
- Gra... gracias, profesor.
- Bueno Kohaku, ahora tienes una compañera, cuídala.
Mientras Inari le ponía la nueva pulsera, Ebisu hacía lo propio con Setsu y Seiji.
- Pues vaya ¿Ahora este es mi pareja? - se quejó Seiji - ¡Menuda mierda!
- Bueno, al menos estaré en un grupo con chicas - dijo Setsu mirando a Yuri - He salido ganando con el cambio, estaba un poco harto de tanto tío.
Setsu y Himeko se cambiaron las chapas y los pañuelos.
- Volved a las mesas, si no habéis terminado de comer, cambiaos los platos - ordenó Chikara.
Kohaku no podía negar que le encantaba que le hubiesen cambiado la pareja por Himeko, lo único que no lo gustaba era la sonrisa estúpida que Deisuke tenía en su cara. Shibi los miraba a los dos, le gustaba que hubiesen separado a Himeko del psicópata de Seiji pero... ella, Kohaku y Deisuke juntos... eso no presagiaba nada bueno, estaba claro que los profesores no sabían la "preferencia" que Kohaku sentía por Himeko y teniendo en cuenta el acoso que Deisuke mostraba hacia ella seguramente ahora Kohaku iba a mostrarse mas alerta y suspicaz.
La misma sensación y los mismos pensamientos eran los que tenía Hizashi.
- ¡Que bien por Himeko, vaya que si! - decía alegrándose Nowaki.
- No me fío de Deisuke, va detrás de ella - hablaba en voz baja Hizashi - Lo sé-
- Pero Kohaku y Shibi la protegerán, ya lo verás.
- Come un poco mas Ryuko - le decía Genki - Tienes que recuperar lo que has gastado.
- Si come, tiene razón el cejotas - añadía Nowaki - Además no sabemos lo que nos espera esta tarde, come para tener fuerzas.
- Hola preciosas - decía Setsu sentándose en el sitio que hacía un rato era de Himeko.
- Que pena que nos hayan quitado a la princesa - comentó Zenko - Ahora a ti te toca más rubia.
- ¡Déjame en paz, subnormal! - le gritó Yuri.
Después de comer, los separaron por grupos y tuvieron una sesión de "auto conocimiento". Reunidos con su capitán, cada uno fue hablando de algo que consideraba importante y de lo que creían podían aportar a su grupo. La mayoría de ellas transcurrieron con relativa tranquilidad aunque los chicos de ambas clases se mostraban tensos y reacios a comunicarse.
Terminada esa sesión pasaron de nuevo a los ejercicios, en esta ocasión los profesores los denominaros "prácticas de campo" bajo la supervisión de monitores del campamento quienes les hicieron practicar tiro, les enseñaron a camuflarse, algunas técnicas de defensa personal y como inmovilizar a un enemigo, en resumen, parecían estar preparándoles para la guerra.
Una vez terminadas estas prácticas, les dijeron que podían ducharse y cambiarse de ropa. Las duchas no eran mixtas pero si contiguas, de forma que no se separaban demasiado de sus "parejas". Este hecho dio lugar a algunos comentarios sobre quien estaría completamente desnudo al otro lado de la pared, sin duda el más desafortunado fue el de Deisuke sobre lo solita que debía encontrarse Himeko y de como se ducharía. Fue la situación más violenta que se creó, en la que Shibi tuvo que poner toda su persuasión para detener a Kohaku y no por ganas de ser el mismo quien le partiese la cara al rubio.
Una vez duchados y de nuevo con su chándal, cogieron sus mochilas y fueron hasta una zona de acampada. Estaba dividida por parcelas, cada parcela tenía clavada una bandera de un color.
- ¿Os lo imagináis, no? - dijo Masashi - Buscad vuestro color y empezar a montar vuestras tiendas. Cada pareja lleva una. Dormiréis por parejas.
- ¿Cómo por parejas? - se interesó Momoka.
- Cada uno con la suya.
- ¿Quieres decir que tengo que dormir con este? - preguntó algo histérica Stella.
- Si, los dos juntitos en la misma tienda.
- Pero... ¿Por qué no duermo con ella? - señaló a Hikari.
- Porque no es tu pareja.
- Pero podemos poner las tiendas juntas y...
Había cierto rumor entre los alumnos.
- ¡Silencio! - gritó Chikara - Dormiréis con vuestra pareja y punto. Cuando terminéis de montar las tiendas hay que preparar la cena, así que espabilaros.
- ¿También tenemos que preparar la cena? - gritó Kikyo - ¿Pero esto que es?
- Es lo que es... vamos, en las mochilas tenéis todo lo que necesitáis, venga ¿a que esperáis?
Entre protestas y quejas comenzaron a montar las tiendas.
- Mira Stella - decía Akira en tono aburrido frente a la chica sentada con gesto enfadado en el suelo - Yo soy un vago, esto es muy problemático, si tú no me ayudas dormiremos al aire libre ¿vale? A mi me da igual.
- ¿Pero como quieres que monte yo una tienda?
- Pues yo no lo voy a hacer solo.
- ¿Tu has visto mis uñas? ¿Sabes lo que cuestan? ¿No ves que me las puedo romper?
- ¿Y tú sabes el frío que puede hacer al aire libre?
- No puede estar pasando esto... Nagato ¿tú le oyes?
- Stella - contestó el aludido - Se que esto es duro para ti, pero tía mira Kanna, ella lo hace ¿no vas a poder tu?
- Yo te ayudaré - habló molesta Hikari - Cuando termine con la mía te ayudo, pero tu también tienes que hacer algo.
- Gracias Hikari, no esperaba de ti que me comprendieras.
- Lo que pasa es que no soporto oír más tus quejas.
- Así que... - Seishiro sonreía mientas se subía sus gafas - Kamui va a dormir con Akane... vaya, vaya, los hay con suerte ¿no, Shikamoto?
- Si no te importa procura mantener tu boca cerrada - le contestó Kyojin.
- Quizás hoy pases a hacer honor a tu nombre - se burló Seishiro - Y consigas una cornamenta, ciervo.
La parcela del equipo magenta lindaba a su izquierda con la del equipo naranja, esta a su vez lo hacía también con la del equipo amarillo y esta con la del verde.
El equipo marino estaba situado enfrente de la parcela del equipo magenta, a su lado, enfrente del naranja, el equipo añil y a su lado, enfrente del equipo amarillo, el violeta. La parcela enfrente del equipo verde estaba libre y parecían ser algunos profesores los que montaban una tienda.
- ¡Eh, Kamui Kaguya! - gritó Seishiro - Procura no hacer gritar mucho a Akane esta noche, que algunos nos podemos morir de envidia.
Kamui soltó la piqueta que tenía en las manos lanzándola contra el suelo a la vez que dedicaba una mirada asesina a su interlocutor. No sabía si ir hacia allí y hacerle tragar el puño o ignorarle.
- Pasa de él - le susurró Akane.
- Tu y yo si que nos lo vamos a pasar bien ¿eh, Kikyo? - se rió Reiji.
- Ni se te ocurra acercarte a mi, asqueroso.
- Ten cuidado gatita, a mi me gusta morder.
- Taro piensa que Reiji debería callarse.
- ¿Tienes algo que decir, payaso?
- Taro es un buen chico y no le gusta pelearse pero Taro sabe hacerlo - Se acercó a él e inesperadamente y antes de que reaccionase, Reiji se encontró inmovilizado contra un árbol - Taro tiene mas de un secreto escondido - dijo en un tono de voz casi siniestro - Pásate un poco y lo lamentarás... ¡Oh! ¿Taro te ha hecho daño? Taro lo siente, a veces no sabe lo que hace.
Le soltó bruscamente. Reiji le miró despectivamente.
- ¿Que pasa aquí? - Sigure había llegado corriendo al ver aquella situación.
- No pasa nada, Taro explicaba a Reiji como comportarse debidamente con una señorita.
- Malditos Kaguya - murmuró por lo bajo - Esta me la paga.
Nowaki se sentaba enfurruñado delante del intento de tienda que estaban montando.
- ¿Ahora que te pasa? - le dijo Hizashi.
- ¡No es justo! ¿Por que con tantas chicas a mi me ha tocado contigo? ¡Todos van a dormir con chicas menos yo!
- Y yo, que voy a dormir contigo.
- ¡No es justo! ¡no es justo! ¡no es justo!
- Levanta el trasero y ponte a trabajar ¿quien te ha dicho que la vida sea justa?
- Yo quiero dormir con Momoka ¿por qué tiene que dormir con ese tío enorme?
- ¿Y por qué tengo que dormir yo contigo y aguantar tus quejas?
- Eres muy trabajadora y pones mucho empeño en lo que haces - decía Takumi a Xu-Xu.
- No me gusta hacerlo pero si hay que hacerlo se tiene que intentar hacerlo bien.
- ¿Que te pasa a ti? - dijo de pronto el chico al ver que Momoka esta mirándole fijamente.
- No me gusta como la miras.
- ¿Tienes algún problema conmigo?
- Bastantes ¿quieres que te los enumere todos?
- Momoka tranquila - medió Xu-Xu - No me está molestando.
- Si esta noche intenta hacerte algo grita bien fuerte ¿vale? y no bebas nada que te de.
- ¿Sabes que eres como insoportable, niñata?
- ¿Podemos dejar de discutir? - Suo se colocó en medio de los dos sonriendo - No se lo que pretenden los profesores pero creo que quieren que trabajemos en equipo.
Ambos se miraron amenazadoramente y se giraron ignorándose.
Entre gruñidos de unos, indirectas que se lanzaban y algunas directas, fueron terminando de montar las tiendas. Después prepararon sus cenas.
- Cuando terminéis - indicaba Masashi - Id yendo al barrancón principal que os tenemos que dar las órdenes para mañana.
Así lo fueron haciendo. Les llevaron a una sala llena de sillas y ellos fueron ocupándolas.
- ¿Cómo nos vais a torturar mañana? - preguntó Zenko.
- Hoy habéis estado haciendo ejercicios, entrenando, se podría decir - habló Chikara - Y mañana vais a efectuar maniobras de guerrilla.
Se extendió un rumor por toda la sala.
- ¡Silencio! - gritó Nanao - Mañana vais a actuar por equipos, seréis un equipo, trabajareis en equipo y pensareis en equipo. Nosotros no os ayudaremos, lo tendréis que hacer todo vosotros solos.
- ¿Pero que es lo que tenemos que hacer exactamente? - interrogó Kuromaru.
- La guerra - respondió Masashi - Vais a declararos la guerra. Cada equipo estará en guerra con los demás.
- Se trata de un ejercicio de supervivencia - dijo Gaito muy emocionado - Solo sobrevivirá el equipo mejor preparado y que mejor sepa actuar como si fuera uno solo.
- Mañana demostrareis como trabajáis en equipo y si sois capaces de sobrevivir - continuó Sigure - Se os van a dar armas como estas - sacó una especie de metralleta y una caja con unas bolas de colores - Esto son cartuchos de pintura, explotan al contacto con un cuerpo, como os imagináis se trata de manchar a los demás equipos con vuestro color.
- ¿Cómo pistolas de agua? - se interesó Nowaki.
- Algo así. Cada equipo será llevado a un punto distinto del recinto. Se os proporcionará un mapa, una brújula, agua y algunas provisiones de comida. Vuestro objetivo es llegar aquí, al barracón principal vivos y sin heridas. Las heridas, evidentemente, serán las manchas de pintura de otros equipos. Tenéis que conseguir llegar el equipo al completo y no solo eso, deberéis traer al menos tres banderas de equipos contrarios y todos los pañuelos que podáis arrebatar. Cuando venzáis a uno de otro equipo deberéis recoger su pañuelo, si no, no sirve.
- Voy a repetirlo yo a ver si lo entendéis - dijo Yotsuda - Sois 7 equipos, todos rivales, aquí no hay amigos, esto es la guerra. Cada equipo tendrá una bandera, si os la arrebatan vuestro equipo queda eliminado automáticamente. Ahora bien, puede que no consigan vuestra bandera pero sufrir bajas, en este caso no ganareis pero a los sobrevivientes os quedará el honor de haber sobrevivido. Para que lo entendáis: manchas de pintura en brazos y piernas son heridas, podéis seguir en el juego, manchas en el pecho o espalda significa que estáis muertos, se acabó. Vuestro, llamémosle "ejecutor" se quedará vuestro pañuelo en recompensa, el que pierda su pañuelo, ya sea porque esté muerto o simplemente herido, se dirigirá a un punto de control, están señalizados en los mapas.
- O sea - habló Hizashi - No es imprescindible "matar" para conseguir el pañuelo ¿no?
- No, no hace falta, además podéis rendiros, si os rendís entregáis vuestro pañuelo y está prohibido "matar" a alguien que se ha rendido. También podéis hacer prisioneros, en ese caso los maniatáis y los lleváis al punto de control más cercano o los lleváis con vosotros. Tener prisioneros es como un bono para ese equipo, claro que tiene el inconveniente de que pueden intentar rescatarlos, ya descubriréis que los prisioneros pueden dar mucho juego.
- Perdona Yotsuda - dijo Akira - ¿Que pasa con las pulseras? Si matamos a uno y no a su pareja ¿que ocurre?
- Tanto si matáis como si cojeéis prisioneros, al conseguir su pañuelo deberéis romper su pulsera, llevareis material necesario para eso y dejareis la pulsera allí para que su pareja la puede recoger... si con eso hacéis una trampa para la pareja eso es cosa vuestra.
- En resumen - siguió hablando Nanao - Ganan los equipos que, estando completos tengan al menos 3 banderas, en caso de empate se contarán los pañuelos y los prisioneros. Los integrantes de un equipo derrotado que aún pueda y quieran luchar podrán hacerlo, se tendrá en cuenta sus pañuelos como méritos personales.
- Una cosa importante - añadió Inari - Si conseguís el pañuelo de alguien ser listos y que os de también los pañuelos que tenga en ese momento en su poder.
- ¿Os habéis enterado bien de todo?
- No, yo no - dijo Nowaki.
- Vale, luego vuestros capitanes os lo repetirán despacio y con palabras fáciles ¿alguna pregunta?
Akira levantó la mano.
- Di, Shikamoto.
- Según he entendido esto es una guerra ¿no? Tenemos que conseguir las banderas y proteger la nuestra ¿vale todo como en la guerra de verdad?
- ¿A que te refieres?
- A aliados, traiciones, espías, trampas, o sea que si vale cualquier cosa con tal de conseguir el objetivo.
- Vale todo, es la guerra.
- Entonces se pueden hacer trampas ¿verdad?
- ¿A que te refieres?
- Si yo consiguiese información digamos "privilegiada" ¿puedo usarla en mi favor?
- Si, si es que eso existiese. Cualquier cosa o acción que os ayude es válida aunque sea trampa. Las alianzas también si es que os fiáis del otro, cambio de prisioneros... todo vale.
- Ahora vamos a nombrar a los lideres de cada equipo - habló Chikara - ¿Cómo los podríamos llamar? A ver, algo a que suenen a que son los que mandan.
- ¿Macho alfa? - habló Kenshi.
- Si bueno... mejor no, suena a jauría de animales.
- Les llamaremos "Tenientes" y "Sargentos" - propuso Masashi - Cada profesor va a nombrar ahora al "Teniente" de vuestro equipo. Lo ha hecho basándose en vuestro rendimiento en el día de hoy entre otras cosas. El o ella será el encargado y responsable de todo, organizará al grupo, nombrará a quien debe llevar la bandera, realizará la estrategia a seguir, si es que la hay; decidirá quien protege a quien y quienes serán mas agresivos... bueno, lo que hace un líder ante una misión. También habrá un "Sargento", un segundo al mando, digamos un hombre de confianza, alguien que le ayude... Bueno, pasemos a conocer a los elegidos.
- Bien - Sigure dio un paso al frente - Por mi equipo, el magenta, creo que la mayoría ya lo tenéis claro. Akira, se que es muy problemático pero te ha tocado, acércate... y tu pareja que venga que no queremos que pite.
Con bastante desgana, Akira se acercó junto con Stella a Sigure, este le dio una bandera de color magenta.
- Tu bandera. El sargento no lo he podido elegir, mis dos candidatos son Nagato y Seishiro pero como tu eres muy listo te dejo el honor de que lo escojas tu.
- ¿Tengo que hacerlo?
- Si, pero puedes pensarlo un poco.
- ¡Y será verdad! Pero que morro tienes, profesor.
Ahora se adelantó Yotsuda.
- Por mi equipo, el naranja, en principio el teniente será Kamui Kaguya y el sargento Taro, aunque si queréis podéis cambiar el orden. Kamui ven a por tu bandera.
Mientras Kamui, seguido por Akane iba a por su bandera, Akemi se preparó para hablar.
- Por el equipo amarillo, el teniente será Karura y el sargento Yuya.
- ¡Chicas al poder! - exclamó Akane.
- Jo, yo quería ser el macho alfa - gruñía Kenshi.
- Hombre el macho ya lo eres - rió Jisei.
- Por el equipo verde - habló Ebisu - El teniente será Karasu y el sargento Setsu, venid alguno a por la bandera.
- ¿Y si no estamos de acuerdo? El mierda ese llegó el último - se quejó Seiji.
- Os aguantáis. La decisión de los profesores es irreversible.
- Por el equipo marino - dijo Inari - El teniente será Deisuke y el sargento Kohaku.
Hubo muchos comentarios.
- Es nuestra decisión y no se discute nada - habló con voz firme Chikara - Seguid.
- Por el equipo añil - dijo Nanao - El teniente será Kimisuke y el sargento Hizashi.
- ¡Esto si que es una injusticia!
- Y por último - habló Gaito - Pero no por ello el peor, por el equipo violeta, el teniente será Takumi y el sargento Suo. Aquí tenéis la bandera.
Después de unas cuantas preguntas más les dieron una nueva mochilas, algo más pequeñas y las pistolas y cargadores que debían utilizar, así como unos brazaletes de su color para los tenientes y sargentos. Volvieron a sus parcelas y allí se reunieron los grupos para planificar sus objetivos.
Akira, de pie, con las manos en los bolsillos observaba al resto de los grupos con gesto serio. Se acercó a Nagato y le ofreció el brazalete que le identificaba como sargento.
- He decidido que seas tu. Esta decisión la he tomado basándome en que dos de los líderes son Takumi y Deisuke, se que ellos te respetan y en cierta manera te sobrestiman, por esa razón pensarán que lo vas a tener todo controlado y nos evitarán hasta el último momento.
- Akira - dijo Kyojin - No olvides que Karura, Karasu y Kamui van a evitarte a ti.
- ¡Ah! Lo que pasa es que somos pocos y nos conocemos mucho. Ya pensaré como manejar esa eventualidad.
Estuvieron un rato charlando hasta que Sigure, Gaito e Inari que eran los que iban a dormir también en una tienda comunicaron que ya era hora de retirarse. Ellos dormirían allí por si había algún problema, los demás profesores se marcharon a unas habitaciones "normales".
Sigure fue a la tienda ocupada por Yuri y Zenko.
- Yuri, cualquier cosa, lo que sea, grita.
- ¿Es que no te fiás de mi, profesor? - apuntilló Zenko.
- No Zenko, no nos fiamos de ti, de hecho ahora mismo eres uno de los que menos nos fiamos.
También acudió a la tienda de Reiji y Kikyo.
- ¿Crees que soy tan tonto como para dejara gritar? - comentó burlón Reiji.
- Reiji, a ver si entiendes esto: si vas a hacerle algo más vale que la mates para que no hable y aún así la cagarás ¿entendido?
- Vale, vale... pues si que somos susceptibles...
Nowaki seguía protestando.
- No es justo, tengo que dormir contigo... espero que no ronques y además no soy ni teniente, ni sargento, ni nada ¿por qué? ¿por qué el destino está contra mi?
- Vamos Nowaki, cállate de una vez y ponte el pijama - le respondía Hizashi.
- Yo no duermo con pijama.
- ¡Pues métete en el saco y duerme!
- ¿Crees que Momoka estará bien?
- Seguro, estará mas a salvo que contigo.
- ¿Y Kamui?
- ¡Y a mi que me importa! ¿Crees que Akane va a atacarle o algo así? En todo caso yo creo que ella sería la que estuviera en peligro. Espero que no le de por... morderla.
- ¿Por qué la iba a morder?
- No se ¿nunca has notado que Kamui podría tener instintos algo salvajes? - Hizashi habló en un susurro aún mas bajo de lo habitual - Ya lo hizo una vez.
- ¿El que?
- No nada, a lo mejor tienes razón, si le hace algo a Akane lo mismo esta es la que le muerde.
Algunas chicas como Stella, Kikyo, Yuri, echaron fuera de la tienda a sus parejas hasta que hubieron puesto sus pijamas y metido en sus sacos.
- No se te ocurra acercarte a mi - advertía Stella.
- No voy a acercarme a ti - decía Akira - Además, aunque lo hiciera, estas embutida en tu saco ¿que iba a tocar?
- Y ni se te ocurra pensar cosas obscenas.
- ¡Bah, que pesada eres! - Akira se metió en su saco con el chándal puesto y le dio la espalda.
Takumi, en su saco, observaba a Xu-Xu a la luz de la linterna, esta, sentada con las piernas cruzadas se peinaba el cabello. Tenía el pelo no demasiado largo y ondulado.
- ¿Te han dicho alguna vez que pareces una muñeca?
Xu-Xu le miró asombrada y algo ruborizada, no había que olvidar que Takumi seria lo que fuese pero era muy guapo.
- ¿A que viene eso?
- No me había fijado nunca en ti pero eres bastante guapa.
- Pues... gracias.
- ¿Tienes novio?
- No... pero me gusta un chico.
- Si me dejases haría de ti la chica perfecta.
- ¿Qué dices?
- Creo que con mis consejos serías la chica perfecta, eres mucho mas guapa que Stella.
- ¿Y por qué harías algo así? - Xu-Xu recogía su pelo en un par de trenzas intentando no mirar a Takumi.
- Es un reto - Se incorporó y cogió a Xu-Xu de la barbilla girándole el rostro hacia él, estaba muy cerca de ella - Me gustaría...
La mano de Xu-Xu se estrelló de forma violenta contra la cara e Takumi.
- Buenas noches - dijo la chica de forma brusca metiéndose en su saco y tumbándose - Procura mantener las distancias, me pongo nerviosa enseguida.
- Buenas noches, muñeca, creo que te voy a poner en mi lista.
Xu-Xu cerró los ojos y trató de actuar como si no hubiese escuchado nada, no sabia a lo que se refería Takumi pero no le gustaba.
Taro miraba fijamente a Jiro.
- ¿Taro puede dormir tranquilo?
- ¿Crees que te voy a meter mano?
- ¿No quieres meter mano a Taro?
- Lo que puedo hacer es meterte un guantazo ¿te vale?
- ¡Oh! Taro entiende... pero lo que Taro quiere saber es si Jiro ronca, porque tienes pinta de roncar.
- Si no te callas nunca lo averiguarás.
Fatora le daba la espalda a Karasu.
- Como ronques te hecho fuera de la tienda - decía la chica.
- ¿Por qué eres tan antipática? Eres una chica maja ¿Por qué tienes tan mal carácter?
Fatora se giró.
- ¿Te parezco maja?
- Me parece que a ti te estropean esas dos amigas tuyas. Tú no eres como ellas.
- ¿Que te hace pensar así?
- Vistes como ellas, hablas como ellas, actuás como ellas pero no eres como ellas. Todo el día, cada vez que las he visto estaban quejándose pero algo, sin embargo tu te has adaptado bastante bien. Creo que no eres tan pija-repelente como ellas, eres pija, pero no tan repelente.
- Vaya... pues... tu tampoco eres como me imaginaba.
- ¿Y cómo me imaginabas?
- Pensé que eras un sucio mono pervertido y salido... y pervertido eres pero aún así has estado pendiente de tus compañeras y hasta de mi y de que Seiji no nos hiciera nada.
- Pero sigo siendo un pervertido - sonrió abiertamente - Lo que pasa es que somos un equipo y tenemos que ayudarnos entre nosotros, sobretodo mañana, algo me dice que algunos piensan que somos débiles.. bueno, vamos a descansar, lo necesitamos.
- Que sepas que cuando esto termine dejaré de pensar que eres agradable y volveré a tratarte como a un sucio mono pervertido.
- Vale, y yo a ti como a una pija-repelente.

0 comentarios: