sábado, 3 de diciembre de 2011

113. Lo que me gusta de tí

Todas las chicas de la clase de 3-2 estaban dentro del aula. Iban de un lado para otro y hablaban sin parar. Algunas se maquillaban, otras se peinaban con mucho esmero y la mayoría terminaban de ponerse sus vestidos de cosplay.

Yuri, vestida con su uniforme de sailor, con su faldita naranja minúscula, terminaba de peinarse su melena rubia y se colocaba un gran lazo rojo como adorno.

- ¿Que tal estoy? - preguntaba a Momoka que, delante de un pequeño espejo, se peleaba con dos mechones de su pelo que intentaba que quedasen levantados.

- Eres totalmente la Guerrero Venus ¿No te dolerán los pies con esos tacones?

- No, no creo, son bastante cómodos.

- Bueno, tú eres la que tienes que llevarlos.

- Me faltan los guantes - se quedó mirando a su amiga - Déjalo Momoka, ponerte las antenas tiesas de Sakura va a ser imposible, confórmate con que estén un poco levantadas.

- No seas tan perfeccionista Momoka - decía Jisei, vestida con un uniforme escolar blanco y verde y que llevaba enganchado un carcaj con flechas y un arco - Se ve de sobra que eres Sakura Kinomoto.

- ¿Me ha quedado bien? - decía levantándose y estirándose la falda rosa.

- Solo te falta el cetro.

- Ah pero si lo tengo ¿Dónde está? Ay Dios mío que al final me lo he dejado.

- Tranquila, no te pongas nerviosa, total, sirviendo las mesas no lo vas a poder llevar.

- Pero yo lo he traído ¿Donde está?

- ¿Buscas esto? - dijo Xu-Xu enseñándole el objeto en cuestión - Anda toma. Kagome - dijo refiriéndose a Jisei - ¿Me puedes ayudar? No puedo con este tocado, me está desesperando.

- Ya voy, Miaka, ya voy. Ya podías haberte vestido de Miaka normalita, con su uniforme, así como yo, no tu no, tu de sacerdotisa.

- Es que ese uniforme daba mucho calor.

- Estas guapísima. Se de uno que se va a quedar embobado cuando te vea.

- Pues no es mi disfraz, yo me lo hice de Kaoru Kamiya, así, sencillito, con el que entrena, pero al final se lo he cambiado a Himeko porque ella me dijo que estaba un poco cansada de ir siempre tan... así, no se... yo se lo he cambiado.

- Ya, ya lo se. Es que creo que el suyo y el de Hizashi se los compró su madre y desde luego este es espectacular.

Jisei dirigió su mirada a Himeko que, vestida y peinada como la protagonista de Rurouni Kenshin peinaba a su vez a una Karura caracterizada como Winry, de Full Metal Alchemist.

- Supongo que está harta de llamar la atención porque este traje llama la atención.

- Pero está muy guapa vestida así a pesar de lo chapuza que soy yo cosiendo. Claro que es que ella es muy guapa y aunque se ponga una lata en la cabeza le quedará bien.

- Mirad que bien ha quedado nuestra Haruhi particular - decía Akane acercándose cogida de la mano de Ryuko.

- Si, estás genial, Ryuko.

- ¿Si? No se, lo he dudado mucho.

- Lo importante es que todo el mundo te ya a identificar enseguida, ya lo verás.

- ¿Y a mi? - preguntó Akane - ¿Se me reconoce?

- ¿Cómo es que te has vestido de Orihime al final? - preguntó Xu-Xu - ¿No ibas a ir de la de Slayers?

- Iba, iba, pero no he tenido tiempo de prepararme el disfraz con esto del trabajo y todo, así que al final aproveché que tenía esta falda y esta camisa que se parece al uniforme y me puse este lazo y me compré las orquillas ¿Parezco Orihime o no? Sumire me ha alisado el pelo.

- Si hija, si, demasiado diría yo - contestó Jisei - Pero ¿Y tus gafas?

- Me las he quitado pero al final me las voy a tener que poner porque no veo ni torta.

- ¿Y Sumire? ¿Dónde anda? - se interesó Xu-Xu.

- Está allí pegándose con una peluca de color rosa, será mejor que vayamos a ayudarla.

Y las cuatro se acercaron a Sumire que, efectivamente, parecía pelearse con una peluca rosa.

- A ver, déjame, desastre - le dijo Jisei - Trae.

Por fin, con la ayuda de Jisei, la peluca encajó en la cabeza de Sumire.

- Ay, por fin - exclamó Sumire aliviada mientras se colocaba el pelo.

- ¿Se puede saber de qué vas? - se extrañó Xu-Xu.

- ¿No es evidente? Soy Suichi Shindo, de Gravitation ¿A que estoy mono?

- Solo a ti se te ocurriría algo así.

- Y mirar, llevo una mochila y dentro he metido un conejito de peluche. Ahora solo me falta encontrar a mi Yuki Eiri particular.

- Bueno - sonrió Akane - Kimisuke es rubio, podíamos decirle que se haga pasar por él.

- No estaría mal - bromeó Jisei - Hasta podíamos haceros fotos.

- Si, si - se entusiasmó ahora Akane - Y hacemos una escena yaoi con vosotros... que interesante que suena.

- Tu mente calenturienta ya está funcionando demasiado - la reprendió Ryuko - Anda que solo a ti se te ocurre vestirte de un chico, Sumire.

- Bueno pero Suichi es Suichi - rió Sumire - No es un chico muy machote.

- Chicas - llamó la atención de todas Yuri - ¿Estamos ya todas vestidas? ¿Podemos abrir ya a los chicos?

- Si, si - contestaron varias - Ábreles.

Yuri así lo hizo y se escucharon las quejas de varios chicos que protestaban por lo tardonas que eran y que ya era hora que les dejaran pasar.

El primero que entró fue Nowaki que llevaba una mano puesta sujetándose un sombrero de paja.

- ¡Luffy! - le gritó Akane - ¡Galleta, galleta!

- ¡Metralleta! - contestó este - ¿Quien me ayuda a pintarme la cicatriz debajo del ojo?

- Anda ven, yo lo hago - dijo Yuri - Anda que menudo Luffy rubio.

- ¿Que pasa? Es que he metido la cabeza en agua oxigenada.

- ¿Me ayudas? - se acercó Akira a Akane, llevaba unos pantalones vaqueros y una sencilla camiseta blanca, las manos en los bolsillos y cierta posición inclinada hacia delante.

- ¿Quien se supone que eres?

- Necesito que me alborotes un poco el pelo y me maquilles unas ojeras.

- ¡L! - gritó entusiasmada Sumire - ¡Eres L!

Karasu pidió a su hermana que le ayudase a ponerse el pelo de punta, se suponía que iba de Son Gohan, con su traje naranja. Hizashi venía con una coleta postiza en la mano para que alguien le ayudase a ponérsela, él iba de Kanda, personaje de D-Grey Man.

Quien consiguió muchos halagos de las chicas fue Kohaku vestido de Syaoran, de Tsubasa Chronicles.

- Si, si muy bien, pero Syaoran no es pelirrojo - protestó Nowaki.

- Ni Luffy rubio, así que calla ya - le regañó Momoka.

- Que guapo está Kenshi del Caballero de Pegaso - susurró Sumire a Xu-Xu.

- Si que está guapo, si, pero calla que nos ha visto.

Efectivamente Kenshi se acercaba a ellas.

- Xu-Xu... - comenzó a decir mientras la miraba con la boca abierta - Estas... fantástica.

- Tu también estás muy guapo, Seiya.

- ¿Y yo no estoy guapo? - intervino Sumire.

- ¿Tu de que vas?

- Jo. Voy de Suichi, de Suichi Shindo.

- Ah... ni idea de quien es pero vale.

- No lo sabes porque va de un chico que se enamora de otro chico.

- Desde luego que solo a ti se te ocurren esas cosas.

- ¿Qué pasa? Pues es mi héroe, no veas si es guapo el que se liga.

Pero sin duda, quien más atrajo la atención fue Genki, vestido de entrenador Pokemon, con sus pokeballs y un Pikachu cosido a su hombro

- ¿Se puede saber de qué Akatsuki vas tu, Kyojin? - le preguntaba Yuri.

- De Akatsuki anónimo, anónimo-uno. Bastante es que he conseguido hacer esta capa.

- ¿La has hecho tu? - se asombraba Ryuko - Pues está genial.

- Bueno, me ha ayudado mi madre.

- ¡Gualá! - exclamó Sumire dirigiéndose a Shibi, totalmente caracterizado como Kenji Harima, de School Rumble - ¡Eres Kenji Harima in person! ¡Mira! ¡Si hasta te has puesto bigotillo!

- Tenía que haberse puesto la barba - rió Akane - Como cuando le creció tanto.

Los últimos en entrar fueron Suo, vestido de Ryoma de Prince of Tennis y Kamui de Lelouch, de Code Geass, que se acercó inmediatamente a Akane.

- Hola, Orihime.

- Hombre, Lelouch, que guapo que estás. Bueno, L, esto ya está.

Akira se levantó y se quedó frente a frente mirando a Kamui.

- ¿Qué? ¿Quién crees que ganaría al ajedrez "Lulu"? - dijo Akira en tono socarrón.

- Vaya dos - suspiró Jisei - Mira que haber escogido a dos "genios.

- Kamui tenía que haber ido de Light - susurró Xu-Xu - Hubiese tenido su morbo.

Después de estar listos y preparados la mayoría de ellos fueron a abrir la cafetería y, por sorteo, a Akane, Ryuko, Kamui, Karasu, Suo y Yuri les tocó ir a la exposición durante el primer turno.

- ¡Los huevos! - exclamaba Momoka en la improvisada cocina de la cafetería - Mira que lo sabía, se nos han olvidado los huevos.

- Bueno no te preocupes, no pasa nada - decía Karura.

- Pero necesitamos huevos para hacer el bizcocho.

- Tranquilízate - repetía Karura - Ahora vamos a la cafetería, seguro que nos venden una docena. A ver, chicos - dijo en voz alta - Necesito un voluntario para ir a pedir huevos a la cafetería, tu mismo, Akira.

- Menudo voluntario - se quejó en voz baja el chico.

- ¿Algún problema?

- No, no, ninguno. Ya voy yo.

Como había dicho Karura, en la cafetería del instituto no tuvieron inconveniente en dale una docena de huevos. Akira se dirigía de nuevo a su cafetería, miró el cielo, se había levantando aire, se aproximaba un temporal, seguramente para el fin de semana, no había que olvidar que estaban en época de tifones, esperaba que el temporal no llegase a su pueblo porque deseaba que fuese todo perfecto.

Iba enfrascado en sus pensamientos, organizando mentalmente lo que deseaba hacer el fin de semana, cuando de repente vio venir un cuerpo a bastante velocidad y sin tiempo a esquivarlo chocó contra él de forma violenta haciéndole perder el equilibrio y casi caer. En un acto reflejo soltó la bolsa con los huevos e intentó sujetar a la persona con la que había chocado pero sin suerte.

- ¡Maldita sea, mira por donde vas! - le gritó una voz femenina.

¿Que mirara por donde iba? Si el iba mirando perfectamente por donde iba, era ella la que se había abalanzado como un misil... una chica tenía que ser.

- ¿Estás bien? - le dijo ofreciéndole una mano.

- ¿Tu crees que estoy bien? - contestó la chica con bastante enfado mientras cogía la mano del chico y se levantaba - ¡Menudo golpe que me he dado!

- ¡Mierda! - se quejó a su vez Akira mirando la bolsa con los huevos rotos en el suelo - ¡Mierda, mierda, mierda!

La chica dirigió su mirada hacia la bolsa, luego miró a Akira que se rascaba la cabeza y luego de nuevo la bolsa.

- ¿Te he roto los huevos? - Y comenzó a reír.

- No le veo la gracia a que me rompas los huevos.

La risa de la chica se hizo aún más escandalosa.

- ¡Te he roto los huevos! ¿Lo piíllas? ¡Los huevos!

Akira la miraba totalmente asombrado, no si, pillarlo lo pillaba pero no le veía la gracia. Pesadamente recogió la bolsa del suelo.

- Agg... ahora me tocará ir a comprar más huevos.

- ¡Nana-chan! - gritó otra chica que llegaba corriendo hasta ellos - ¿Qué te ha pasado?

- Ah, Reira, no pasa nada, solo este chico que me ha tirado - se quedó observando muy seria a Akira - ¿Te has maquillado ojeras?

- Si, me las he maquillado - contestó mirando con pena los huevos.

- ¿Te ha pasado algo? - seguía preocupada la segunda chica.

- No, estoy bien, pero le he roto los huevos a él.

- Se refiere a estos - añadió Akira levantando la bolsa.

- ¿Y eso de las ojeras es alguna moda "emo"? - insistía la primera a Akira.

- No. Se supone que voy vestido de un personaje de anime, es que mi clase ha montado una cafetería cosplay y yo voy de L, pasaos luego por ahí, tendremos bizcocho en cuanto yo consiga más huevos, claro.

- ¿Tenéis chocolate? - preguntó la primera.

Akira la observó, era una chica algo más joven que él, eso le parecía, alta, muy alta, más alta incluso que Xu-Xu, casi era tan alta como él, muy delgada, de pelo de color chocolate al igual que sus expresivos ojos.

- ¿Te gusta el chocolate?

- Me encanta. Si me invitas a chocolate te perdono el empujón.

- Nana, por favor, no tengas tanta cara - habló por lo bajo la otra chica. Akira la miró ahora a ella, esta era algo mas baja, también castaña, cara dulce y enormes ojos - Venga Nana, vámonos que llegamos tarde,

- ¡Es cierto! - exclamó.

Y tal y como había llegado, como una exhalación, la chica se marchó seguida por su amiga.

...

En el salón de exposiciones iban entrando alumnos y profesores a ver las fotografías de Sumire y los dibujos de Suo. Este, sentado tras una pequeña mesa continuaba dibujando, los visitantes se acercaban a él a ver lo que hacía y solían pedirle un dibujo firmado.

Yuri disfrutaba mucho explicando cosas de los dibujos y las fotografías que había colgadas a todo aquel que quería escucharla y además informaba de que si querían un dibujo de alguna fotografía suya podían llevarla y por un módico precio, Suo lo haría.

También parecía disfrutar con todo eso Karasu, quizás porque le daba oportunidad de hablar con muchas chicas y eso siempre era agradable.

El que no parecía disfrutar para nada era Kamui. Estaba serio, taciturno y con aire abstraído.

No se encontraba nada bien. Tenía una especie de rabia y pena interior que no sabía controlar y que cada vez le agobiaba más. Sabía que no se había comportado bien con Nowaki, a fin de cuentas este solo se había preocupado por él pero es que no lo pudo evitar. No quería la compasión de nadie, le habían educado para ser fuerte y orgulloso y para que nunca le vieran débil: él era parte de una familia importante y nunca debía mostrar debilidad frente a nadie.

Así le habían educado y así era él.

No sabía tener confianza en los demás, no sabía acudir a tus amigos cuando tenía problemas, no sabía compartir sus sentimientos, y lo peor de todo, siempre creyó que no necesitaba tener amigos para nada.

Pero Nowaki era su amigo, siempre había confiado en él y Momoka era su amiga y ahora él se empeñaba en separarlos de su lado llevado por ese maldito orgullo.

Akane le miraba algo preocupada.

- ¿Por qué miras tanto al Kaguya? - pareció reprocharle Ryuko.

- Es que creo que le pasa algo, bueno no, estoy segura de que le pasa algo. El domingo me llamó y me dijo que quería que hablásemos y que tenía un problema.

- Si, claro.

- Me da un poco de pena ¿Crees que debería ir a hablar con él?

- ¡No! - casi gritó - ¿Por qué iba a hablar con él?

- Hija pues porque es mi compañero y porque me dijo que necesitaba hablar conmigo.

- Ya, hablar contigo, claro.

- Eres muy desconfiada.

- Es que es muy pesado Akane ¿No te has dado cuenta de que va detrás de ti?

- Que exagerada que eres. Simplemente somos amigos, tiene pocos amigos, quizás porque nadie le da una oportunidad.

- A lo mejor es porque él no quiere que se la den.

- Pues a mí si me la da.

- ¿Y por qué será eso?

- A mi me da penilla. Yo voy a hablar con él.

- ¡Pero tu estás saliendo con Akira!

- ¿Y que pasa? ¿No puedo hablar con otro chico si me da la gana?

- Pero se va a pensar lo que no es.

- Bueno, pues le explicaré que no es lo que piensa.

- Entonces dejará de interesarle hablar contigo, ya lo verás.

- Bueno pues entonces me quedaré tranquila.

- No entiendo esas ganas de hablar con él.

- Y yo no entiendo porqué te pones así. Realmente Kamui no se ha portado mal conmigo, yo no puedo estar molesta con él o enfadada. Siempre ha sido educado y agradable, vale que de pronto le dio un repentón y me quiso besar y me dijo que ya le había besado...

- ¿Lo ves?

- Pero cuando yo le rechacé no lo volvió a intentar. Ryuko, conmigo se ha portado bien, quizás es un poco pesado regalándome bombones, flores y caramelos pero...

- Akane no lo entiendes - empezaba a desesperarse Ryuko - No entiendes nada. Ese chico se está enamorando de ti.

- ¡Anda ya! ¡Pues no eres tu exagerada ni nada! Mira, yo voy a preguntarle que le pasa, a lo mejor necesita hablar con alguien y no veo que hay de malo en que hable con él.

- ¿Y Akira?

- ¿Akira qué? ¿Es que no voy a poder hablar con más chicos?

- Pero es que...

- Mira, te prometo que si intenta algo le voy a dejar muy claro que estoy saliendo con Akira ¿Vale? Mira, a lo mejor es una solución, a lo mejor el chico está confundido conmigo porque dejo que me regale cosas y me invite y quizás piense que le doy oportunidades... en ese caso ya si que tengo que hablar con él y dejárselo muy claro ¿No crees?

- Si... visto así... en ese caso tienes razón. Pero ten cuidado.

- Tranquila, si intenta violarme gritaré - bromeó mientras se alejaba de ella y pensaba lo exagerada que podía llegar a ser su amiga.

Y es que realmente Akane no veía por qué tenía que caerle mal Kamui a la fuerza. Vale que todos sus amigos parecían tener algo en su contra, quizás porque le veían como un rival para Akira y por alguna oscura razón todos estaban a favor de este, pero es que Kamui no se había portado mal con Akane y por lo menos se merecía una explicación. Además que si todos tenían razón e iba detrás de ella pues tendría que ser franca con él, no podía dejar que se hiciera ilusiones si ella a quien le estaba dando una oportunidad era Akira... eso de jugar con dos chicos no era muy noble.

Y sobre ese tema... cierto era que Kamui se había comportado como un crío caprichoso y había salido con Momoka para "ver que sentía" y que eso no había estado bien pero eso no quería decir que ella le dejase hacerse ilusiones, si es que se hacía alguna ilusión, claro, lo mismo Akira tenía razón y lo único que pretendía era enrollarse con ella... mira, más razón aún para dejarle las cosas claras.

Kamui miraba distraído los distintos dibujos cuando vio como Akane se acercaba a él.

- Hola - dijo sonriendo la chica,

- Hola.

- ¿Aburrido?

- No, para nada.

- Mentiroso. Oye... esto... ¿Cómo te encuentras?

- ¿Cómo me encuentro de qué?

- El otro día me llamaste y me dijiste que tenías un problema.

- Ah si, es cierto. Bueno, fue un impulso que tuve pero ya se me pasó.

- ¿El impulso o el problema?

- ¿Nos podemos sentar en esas sillas? Me gustaría hablar contigo.

- Claro, vamos - llegaron hasta unas sillas situadas junto a una de las paredes y se sentaron - Cuéntame que te pasa.

- ¿De verdad estás saliendo con Akira?

- Pues podría decirse que si - Kamui bajó la vista algo desilusionado - Al menos hemos decidido intentarlo, a ver que pasa.

- Ya veo. Supongo que tengo que agradecerte la sinceridad ¿Estás enamorada de él?

- Hemos decidido que no vamos a hablar de sentimientos, simplemente estamos bien juntos.

- ¿Te gusta?

- Si que me gusta, es que él es muy bueno conmigo, tengo confianza con él, me escucha, me ayuda...

- Entiendo.

- ¿Y tú, qué? Creo que el otro día discutiste con Momoka.

- Supongo que en el fondo tenía toda la razón del mundo para enfadarse conmigo.

- ¿Averiguaste ya lo que sentías?

- Averigüé que me gustas tú, que me gusta estar contigo y que tú me haces sentirme especial.

Desde luego que esa situación era bastante incómoda, Akane no sabía donde mirar.

- Bueno, es que somos amigos ¿no?

- No. Yo no tengo amigos, no se tener amigos, a todos mis amigos los aparto de mi lado y tu me aguantas porque eres una buena persona.

- No creas, no.

- ¿Sabes otra cosa que he descubierto? Que tú me gustas más que la otra Akane.

- ¿Cómo has dicho? - preguntó medio riendo segura de que era algún tipo de broma.

- Si, la otra Akane es muy simpática y divertida pero cuando me besas siento que estás jugando conmigo y que no te importo nada.

- ¿Qué dices?

- Te prefiero cuando no me dejas acercarme a ti pero me escuchas y me sonríes.

- ¿Te encuentras bien? A ver, mírame a los ojos - le cogió de la cara con las dos manos y le obligó a mirarla. Akane entornó los ojos como si pretendiese descubrir algo en su mirada.

- ¿Que miras tanto?

- No parece que tengas las pupilas dilatadas ni nada.

- ¿Por qué iba a…? ¿Piensas que me drogo?

- Sinceramente Kamui, dices cosas muy... sin sentido.

- ¿No recuerdas lo que hablamos el lunes?

- ¿El qué?

- Cuando nos quedamos solos en el aula... Akane... ¿No te acuerdas de lo que me dijiste?

Akane le miraba confundida y ciertos nervios empezaban a formarse en su estómago. Ahora fue Kamui el que parecía querer penetrar en su mente a través de sus ojos ¿Es que realmente no recordaba nada?

- Kamui ¿Te pasa algo?

No sabía que contestarla, Akane parecía realmente no entender nada. Todo aquello cada vez era más confuso para él.

- No importa - balbuceó, no sabía porqué pero algo le decía, como una especie de instinto dentro de él, que tenía que callarse - ¿Quieres saber que es lo que me tiene tan preocupado?

- Solo si quieres contármelo.

- Mi padre quiere casarme.

- ¿Qué quiere casarte?

- Si. Soy un Kaguya y debo comportarme como tal.

- Entiendo. Vosotros y vuestros deberes sociales... mira, eso es lo bueno de ser un don nadie. Supongo que eso te tiene un poco nervioso.

Kamui sonrió mirándola, no sabía si la chica se había enterado de su problema o simplemente pensaba que se sentía presionado.

Ryuko les miraba intrigada. Que rabia no poder escuchar de lo que estaban hablando ¿Sería capaz Akane de decirle que estaba saliendo con Akira? Esperaba que si porque no le gustaría averiguar lo contrario.

Un grupo entraba en el salón y ahora su atención se centró en ellos, sobretodo en el chico castaño que se colocaba las gafas mientras miraba todo con media sonrisilla.

Buscó a sus compañeros con la mirada. Suo seguía dibujando y Akane parecía distraída hablando con Kamui y no darse cuenta de nada.

- Bienvenidos a nuestra exposición - saludó respetuosa al grupo - Por favor, disfrutar de nuestras fotografías y dibujos.

Volvió a buscar a sus compañeros. Ni Karasu, ni Yuri estaban cerca.

- Bienvenido a nuestra exposición - saludó nerviosa a Seishiro.

- ¿Si me gusta alguna fotografía la puedo comprar? - comentó el chico sonriendo de medio lado.

- Lo siento pero no están en venta.

- ¿Ah no? Que pena ¿Esa eres tú? - señaló la foto que Sumire le había hecho vestida con aquel traje blanco lleno de encajes.

- Si... soy yo.

- Muy guapa, realmente guapa.

- ¿Que querías, Seishiro? - se acercó rápidamente a él Akane en cuanto se dio cuenta de su presencia.

- No quiero nada, solo estoy viendo las fotos y hablando tranquilamente con Ryuko ¿A que si?

- No pasa nada, Akane - se apresuró a hablar Ryuko.

- Eso es, gatita salvaje, no pasa nada - hizo un ademán como para tocar su cara pero Akane se apartó rápidamente.

- Seishiro, tengo que pedirte que te marches - habló muy serio Kamui.

- ¿Por qué? ¿No es esto una exposición para todos?

- Tú no debes entrar aquí y lo sabes.

- ¿Quien me va a echar? ¿Tu? No estoy haciendo nada malo, solo hablo con mi amiga Ryuko ¿A que sí, guapísima?

Seishiro pasó la mano por la cintura de Ryuko y lo siguiente que sintió fue un puño incrustándose en sus costillas.

- Lárgate de aquí, Yakushi - gruñó Karasu.

- Si que eres rápido Akasagan, no te he visto venir - se quejó tocándose donde le había golpeado.

- ¡Que te largues!

- Mira por donde te acabas de meter en un lío. No debiste haberme pegado.

- Y tú no debiste tocar a Ryuko.

Aquella escena había producido cierto alboroto y todo el mundo se acercó a ver que es lo que pasaba.

- ¡Vale! - Akane se puso entre los dos chicos - Ya vamos a dejar esto, solo ha sido un malentendido.

- No guapita, no - sonrió Seishiro - Tu amigo me ha golpeado y acaba de meteros en un lío.

- ¿Ah si? - Kamui se acercó a él - ¿Y que vas a hacer?

- ¿Tu también quieres pegarme?

- Seishiro vete - habló Akane - Por favor, disculpa nuestra mala educación y vete.

- ¿Quieres que olvide que me ha pegado?

- Por favor.

- Akane no te humilles - gruñó Karasu - No merece la pena. Si, le he pegado y como siga con esa actitud volveré a hacerlo.

- Por favor Karasu... deja que se marche tranquilamente, no merece la pena que nos metamos en más líos.

- Ten por seguro que esto lo va a saber la directora, a no ser, querida Akane, que lleguemos a un acuerdo, tú sabes a lo que me refiero.

- Ya estas corriendo para decírselo - habló entre dientes Karasu - Maldito bicho rastrero.

- Te has metido en un lío, Akasagan.

Seishiro se marchó y Akane comenzó a disculparse con las personas que allí había por el desagradable espectáculo.

- ¿Te encuentras bien? - se dirigió Suo a Ryuko.

- Si, si no ha pasado nada.

- Anda Karasu - le dijo Akane - Será mejor que vayas a la cafetería y te tranquilices.

- Estoy muy tranquilo, mucho, es que no me puedo creer que haya tenido el descaro de entrar aquí, sabe que no puede hacerlo y encima se atreve a tocar a Ryuko.

- Vale, vale - continuaba Akane - No ha pasado nada. Anda, tú y Ryuko ir a la cafetería.

- No, yo estoy bien - intervino Ryuko - Cumpliré mi turno aquí.

- Pero yo me he puesto nerviosa y prefiero que vayas a la cafetería.

- ¿Crees que van a volver? - preguntó Kamui.

- No me fío de Seishiro. Por favor, Karasu, llévate a Ryuko a la cafetería.

- La acompañaré pero volveré, no voy a dejarte sola.

- Estoy yo aquí, no lo olvides - protestó Kamui.

- Mira, creo que es mejor que las chicas no estéis aquí - habló Suo - No se, esto es como muy solitario.

- ¿Crees que nos pueden hacer algo? - se asustó Yuri.

- Es imposible que nos pase nada - opinó Akane - No van a ser tan descarados. Seishiro solo quería pincharnos y ya lo ha hecho, no seáis exagerados, estáis sacando todo de quicio. Lo peor es la bronca que nos va a echar la directora porque seguro que todo será culpa nuestra.

- ¿Kyojin? - oyeron hablar a Yuri - Hemos tenido un problema ¿Puedes cambiar el turno a Karasu?

- ¿Qué haces? - preguntó Suo al verla hablar por el teléfono móvil.

- Si queréis proteger a Ryuko el mejor es Kyojin ¿O no?... ¿Qué decías Kyojin?... No pasa nada, es que Seishiro ha estado por aquí pero ya está todo controlado... Si... si... si, no te preocupes... vale.

Yuri colgó y miró a sus compañeros mirándola fijamente.

- ¿Que os pasa? Ya está solucionado. Ahora vienen.

- ¿Para que les dices nada? - gruñó Akane.

- Para que lo sepan ¿Es que se lo ibas a ocultar?

- Ahora se van a preocupar y no hay motivo para preocuparse - volvió a gruñir Akane.

- Si hay motivo, Akane, si hay motivo - dijo Ryuko con un pequeño hilo de voz mientras señalaba la puerta por donde entraban otros dos chicos de la clase de 3-1, Deisuke y Takumi, justo los mismos que protagonizaron el incidente con Himeko, seguidos de Stella y Kikyo.

- Ahora estos, lo que nos faltaba - se quejó Akane.

- No os preocupéis - dijo Yuri muy resuelta - De estos me ocupo yo. Dejármelos a mí. Bienvenidos - saludo sonriente - Hola chicas, que bien que os hayáis decidido a venir ¿Queréis que os haga de guía?

- Vaya - comentó Akane al verla tan decidida - Parece que hasta disfruta con esto.

- De todas formas - añadió Karasu - Conviene que no les quitemos el ojo de encima… por si acaso.

...

En la cafetería tenían bastante jaleo, parecía que había sido todo un éxito y Momoka y Akira, encargados en ese momento de la cocina no daban a basto con los pedidos.

De pronto Nowaki entró como una exhalación abordando prácticamente a Akira.

- Ha venido mi hermana con tu hermana y una amiga - dijo con misterio.

- Claro, es una cafetería ¿Que hay de raro?

- Me ha dicho Minako que le ha dicho Chiharu que mañana vas a tu pueblo y que vas a invitar a Akane porque es tu cumpleaños y que vais a hacer una fiesta y que además vais a ver los ciervos porque es la época de celo y Chiharu le ha dicho a Minako que ella también puede ir ¿es cierto?

- A ver, habla mas despacio y te entenderé.

- Que dice Minako que tus padres le han dicho a Chiharu que puede invitarla a pasar el fin de semana a tu pueblo.

- Pues si ella lo ha dicho, así será.

- ¿Seguro?

- Pues supongo que si.

- Pero es que, mi padre va a decir que yo acompañe a Minako y no es porque no se fíe de ti, es porque no se fía de ellas juntas y de como se vayan a portar.

- ¿Y cual es el problema?

- Que de pronto he pensado que si voy yo a lo mejor podría ir también Yuri, Yuri es muy amiga tuya ¿verdad que si?

- Yuri siempre que quiera puede venir a mi pueblo pero no va a querer venir.

- ¿Por qué no?

- Pregúntaselo a ella.

- A Yuri no le gusta el campo - intervino Momoka que estaba friendo rosquillas que ella misma había amasado.

- Se aburre bastante - continuó Akira - En mi pueblo no hay mucho que hacer, a parte de ver ciervos.

- Además mañana vamos a ir a una fiesta, tenemos unas invitaciones para el club de tenis. Mejor no hagas que tenga que escoger, imagínate lo que elegirá.

- Pues vaya - se quejó Nowaki.

- ¿Y por qué quieres que vaya Yuri? - se interesó Momoka.

- Pensé que un cambio de aires le vendría bien, además en el campo siempre se abre el apetito.

- ¿O habéis enterado de lo que ha pasado en la exposición? - se acercó a ellos muy alterada Sumire.

- No ¿Ha pasado algo? - se alarmó Momoka.

- Por lo visto ha entrado Seishiro o algo así. Yuri ha llamado y ha dicho que vaya Kyojin a sustituir a Karasu.

- Que raro - comentó Momoka - Voy a llamar a Yuri a ver. Ocupaos del aceite, que no se queme.

- Ocúpate tu Sumire - dijo Akira, yo voy a llamar a Akane.

- Pero...

De improviso Sumire se vio sola en la pequeña cocina improvisada.

- ¿Que ha pasado? - se asomó Kimisuke.

- ¡Kirin! ¡Que bien que has venido!

- ¿Ha pasado algo?

- No se, creo que si o no, es que no me he enterado bien, algo con Seishiro.

- ¿Os ha molestado?

- A nosotros no pero por lo visto ha estado en la exposición, es que tenemos una exposición en el salón de actos, hemos puesto fotografías y dibujos, yo he hecho las fotografías y Suo los dibujos. Es que a mi me gusta mucho hacer fotografías y les hice a todos, a todos mis compañeros ¡Anda! a ti no te he fotografiado nunca, uy que mal, porque tu tienes pinta de ser muy fotogénico ¿Quieres que te haga una fotografía? He traído las cámara para hacernos fotos ¿Has visto que guapos estamos todos?

- Sumire... - empezó a decir el chico con cara de susto - ¡El aceite!

- ¿Que aceite?

- ¡La sartén! está ardiendo.

Sumire pegó un grito y se puso a dar saltos nerviosos mirando las llamas que se veían bailar en la sartén.

- ¡El aceite! Ay, ay, ay... ¿Que hacemos?

- Trae algo para tapar la sartén.

Antes de que Sumire pudiera responder Kimisuke ya había cogido otra sartén y tapaba con ella la que estaba en el fuego mientras giraba el mando para apagar el fogón.

- ¿Ya está? - preguntó asustada Sumire.

- Abre la ventana que aquí va a salir mucho humo.

. . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Los disfraces:

* Yuri…. Minako Aino (llamada en España Carola Aino), también conocida como Guerrero Venus o Sailor Venus.

* Momoka…. Sakura Kinomoto, de Card Captor Sakura.

* Jisei….Kagome, de Inuyasha.

* Xu-Xu…. Miaka, con el traje de sacerdotisa de Suzaku, de Fushigi Yugi.

* Himeko….Kaoru Kamiya, de Rurouni Kenshin, vestida con el traje de entrenamiento.

* Karura…. Winry, de Full Metal Alchemist.

* Akane…. Orihime Inoue, de Bleach.

* Ryuko…. Haruhi, de Suzumiya Haruhi no yuutsu.

* Sumire….Shuichi Sindo, de Gravitation.

* Nowaki….Luffy, de One Piece.

* Karasu….Son Gohan, de Dragon Ball Z.

* Akira…. "L", de Death Note.

* Kohaku…. Syaoran, de Tsubasa Chronicles.

* Kyojin…. Va vestido de "akatsuki", sin especificar cual, de Naruto Shippuuden.

* Shibi…. Kenji Harima, de School Rumble.

* Kenshi….Seiya, como caballero de bronce de Pegaso, de Saint Seiya.

* Genki…. Ash Ketchum, de Pokemon, con Pikachu incluido.

* Hizashi….Yuu Kanda, de D-Grey Man.

* Suo…. Ryoma, de Prince of Tennis.

* Kamui….Lelouch Lamperouge "Lulu", de Code Geass.

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