martes, 26 de enero de 2010

08. Conservemos la calma

Los párrafos que recitan Akane y Akira pertenecen a "Romeo y Julieta" de William Shakesapeare. vamos que no la he creado, solo cogidas prestadas.
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Los cuatro miraban la trampilla que les había indicado la directora, si, estaba allí, en el techo.
- Bien - dijo Kyojin - la hemos encontrado, el problema ahora es abrirla.
- ¡Ahg, esta directora! - se quejó Akira.
- ¿Y esto no os lo dijo? - añadió Ryuko.
- No se nos ocurrió preguntar - contestó Akane - ¿Habrá alguna escalera por algún sitio?
- Si, en el cuarto de las calderas - afirmó Kyojin.
- ¿Allá abajo?
- El cuarto de calderas está siempre abierto o eso creo.
- Pues habrá que bajar a por ella - propuso en todo aburrido Akira.
- Y subirla - agregó Akane.
- ¡Menudo tostón! - volvió a quejarse Akira - La directora nos la ha jugado.
- Bueno, venga - dispuso Kyojin - ¡A por la escalera!
- ¡Ahg! Vamos Kyojin y yo, vosotras esperad aquí, no hace falta que vayamos todos.
Akane estaba a punto de protestar pero Akira, camino de las escaleras levantó la mano y la miró sonriendo de reojo.
- Luego la bajáis vosotras - dijo.
Akane hizo un gesto de burla mientas veía bajar a los chicos.
- Vamos nosotros - decía en tono grotesco - que somos unos machotes.
- Encima que el chico lo hace por ser amable y no vayas tú.
- ¿Y por qué no puedo ir yo? Lo hace porque sí, porque es así, siempre tan...
- ¿Educado?
- ¿Machista?
- Te estás pasando Akane, a ti se te ha metido en la cabeza que le tiene manía a las mujeres.
- ¡Pero si él mismo lo reconoce!
- Bueno, puede, pero no es tan machista como crees.
- Bah, déjalo, no nos vamos a poner de acuerdo nunca.
- Estás furiosa.
- Siempre que habla me pone furiosa, tiene ese don.
- Eso son lo celos.
- ¿Qué celos?
- Los que has sentido al verlo con tanta chica al lado.
- Si vamos, que casi me muero al ver como le manoseaban.
- ¿Lo ves? ¿Lo ves?
- ¿Qué?
- Estás celosa, no lo niegues, estás celosa.
- En esos momentos Ryuko te confieso que...
- Estabas celosa.
- Que le hubiera dado un par de collejas ¿cómo se puede ser tan... tonto?
- Celosa.
- Aquí la única celosa eres tú. Reconócelo cuando Yuri se ha despedido con aquel besito se te han revuelto las tripas.
- ¿Eso es lo que has sentido tú?
- ¡Vale ya! Al final terminaremos discutiendo, como broma ya basta.
- Vale, vale.
De camino a por la escalera, Kyojin y Akira tenían una conversación parecida.
- Es normal que Akane esté enfadada contigo.
- Ella siempre está enfadada conmigo.
- Reconoce que no te has portado demasiado bien.
- Quizás debí haber apoyado más a Karura ¿no? Mañana hablaré con la directora.
- Vale, pero no me refiero a eso, te hablo de Akane.
- Ya, ya lo sé
- ¿Y no te sientes mal?
- ¿Qué pasó con Zenko?
- Vaya, creía que no iban a preguntarlo.
- Yuya y Tsuki no me dejaban acercarme.
- No, ya lo vi, te toqueteaban bien ¿eh?
- ¡Que pesadas! No paraban de hablar y hablar y luego vino Yuri y... ¡Nunca entenderé a las mujeres!
- El caso es que Zenko se pasó con ella y tú no fuiste a ayudarla.
- ¿Qué le dijo?
- Que le iba a partir la boca, solo eso.
- ¿La amenazó?
- Pero no te preocupes, ella supo salir del atolladero sin tu ayuda.
- ¿Zenko llegó a amenazarla?
- Tú estabas muy ocupado, no te culpes, no podías saberlo.
- Pero eso es algo...
- Tranquilo, ya pasó, claro que seguro que Kamui habría ido a ayudarla.
- ¿Kamui? ¿A que viene ahora Kamui?
- Por nada, no te preocupes que nadie te lo va a echar en cara. Vamos, se que es duro pero ya pasó, olvídalo. Tienes que tener en cuenta que Kamui lleva toda la vida zafándose de las chicas, a ti te falta experiencia.
- Mira... vamos a los la escalera, cogemos ese maldito baúl y después te acompaño a casa, te tomas una lecha caliente y te metes en la cama, no te encuentras muy bien.
- Te la van a quitar.
- ¿La escalera?
- Como no espabiles te la quitan.
Akira se paró.
- Kyojin realmente estás muy raro ¿Quién me va a quitar una escalera?
- ¿Y quien habla de escaleras? Te hablo de Akane, espabila que te la quita ¿A qué estás esperando?
- ¿A qué estás esperando tú?
- No hablamos de mí, sino de ti y de Akane.
- ¿Qué tengo que hacer para que acabes con esta tontería?
- Reconoce que estás loco por ella y me callaré.
- ¿Si digo que me gusta me dejarás tranquilo?
- ¿Lo ves? Lo has dicho.
- Eres imposible, pero imposible de verdad.
El trastero era un cuarto oscuro, sin ventanas, algo polvoriento, demasiado limpio para lo que esperaban encontrar, lleno de estanterías y cajas por todas partes. Akira fue el primero en subir, a tientas buscó el interruptor de la luz, luego ayudó a Akane y a Ryuko.
- ¿A mí no me vas a echar una mano? - decía Kyojin asomando la cabeza.
- Al cuello te la voy a echar.
- ¡Carai, que sitio! - exclamó Ryuko - ¡Es increíble!
- Me encantan estos lugares, están llenos de magia - dijo Akane - ¿Cuántos recuerdos habrá aquí guardados?
- Venga - habló Akira - Vamos a buscar el baúl.
- Resulta raro verte a ti con prisas, bambi.
- Tiene que ser esto - Akira señalaba un viejo arcón de madera - Lo abrimos y salimos de dudas.
Kyojin lo arrastró un poco hacia adelante y abrió la cerradura, levantando la tapa. Dentro se podían ver telas, espadas, coronas...
- Parece que acertamos - dijo sacando una espada.
- ¡Qué emocionante! - dijo Ryuko - Es como encontrar un tesoro.
- El sueño de una noche de verano - musitó Akane - Mirad, es el libreto de una obra de teatro.
- ¿Dónde has encontrado eso?
- Estaba aquí - señaló una estantería. Abril 1970, ayer mismo. Mirad que curioso, el reparto: Titania, reina de la hadas: Chikara.
- ¿Será la directora?
- Y sigue, Oberón, rey de las hadas: Masashi. ¿Os los imagináis?
- Pues aquí hay más - añadió Ryuko - Fotos de otras obras, folletos... Parece que este instituto tiene historia... ¡Fijaos! 1992, obra "Romeo y Julieta" ¡mirad quienes son!
- ¡Pero si son Yotsuda y Akemi, los profesores! ¡Y por aquí sale Sigure!
- ¡Que fuerte! - terció Kyojin - Yotsuda hizo de Romeo y Akemi está guapísima. ¿A que no sabéis una cosa? Akira también hizo una vez de Romeo.
- ¡Anda ya! - rió Akane
- Es verdad, fue en un campamento, yo también actué, pero vamos, a mí ni se me veía.
- No me imagino yo a este de Romeo - intervino Akane.
- Prefiero no recordar esta etapa de mi vida.
- ¿Y sabéis quien era Julieta?
- No me lo digas... Yuri.
Akane y Ryuko se echaron a reír.
- ¿Qué os hace tanta gracia? - se molestó Akira.
- Nada, nada, solo me lo imagino - dijo Akane.
- La verdad es que fue un verdadero rollo - se quejó Akira.
- Yo quería ser Romeo - siguió Kyojin - pero Yuri se negó.
- ¿Y quiso que fuese este?
- Por aquel entonces - continuó Kyojin - a mi me gustaba Yuri, para mi era como una princesa, la niñas más guapa que conocía, teníamos 9 años.
- ¡Oh, el primer amor! ¡Que ternura!
- El primer desengaño. Me dejó muy clarito que nunca le gustaría un chico como yo.
- ¿Te declaraste? - preguntó curiosa Akane.
- No. No me dio ni tiempo, a ella le interesaban otros chicos.
- Bueno, pero eso fue hace años - intervino Akira.
- Si pero mi autoestima lo recuerda.
- ¿Aún te gusta? - preguntó asustada Ryuko.
- ¡No! En cuanto me di cuenta de que le gustaba otro chico me olvidé de ella, de su pelo rubio y dejó de ser una princesa.
- Si - dijo Akane - la mejor forma de superar un desengaño es bajar a tu "ideal" al suelo. Además es una tontería sufrir por alguien que no te valora.
Akira se quedó mirándola con cierta tristeza.
- La mancha de una mora con otra verde se quita ¿no? - comentó con amargura.
- Supongo que sí - contestó Akane mirándole a los ojos - Es mejor pensar que ellos se lo pierden.
- Ya pero a veces - siguió hablando Akira - el corazón no hace caso y sientes que tu cuerpo piensa por si solo.
Akane le miraba un poco asombrada, la verdad es que esta tarde Akira no dejaba de sorprenderla, primero dice que le gusta la poesía y luego filosofea sobre el amor ¿era ese el Akira quejicoso de siempre?
- ¡Ah, que lata! - se quejó el chico - Venga que se nos hace tarde.
Akane metió el libreto que había encontrado en el arcón y lo cerró.
Lo difícil era bajarlo de allí. El baúl pesaba lo suyo ¿Cómo lo iban a bajar por esa escalera de mano?
Se les ocurrían muchas formas... ninguna viable. No había forma, la cosa era más difícil de lo que parecía.
- Lo mejor será tirarlo por el agujero - sentenció Akane.
- ¡Pero que bruta eres! - exclamó Akira.
- ¿Y si lo vaciamos? - propuso Ryuko - Así pesaría menos.
- Y luego lo tiramos por el agujero.
- Yo tengo hambre - habló Kyojin - Me siento débil y sin fuerzas.
Mientras pensáis voy a ver si saco algo de la máquina de la cafetería ¿Estará abierta?
La tormenta cobraba más fuerza. Akira observó que Ryuko estaba cada vez más nerviosa y no paraba de mirar la escalera de mano; llegó a la conclusión de que tanto los relámpagos como la idea de bajar por esa escalera la estaban aterrando. Se asomó por la trampilla y cuando vio que Kyojin se había alejado se acercó a la chica.
- Bueno Ryuko, Kyojin no está, así que ahora voy a ayudarte a bajar.
- ¿Qué dices?
- Me da la impresión de que no te gustan esas escaleras.
- ¡Ja! - dijo Akane. ¡Te ha calado Ryu!
- Bu... bueno, es que...
- Ryuko sufre de vértigo.
- No te preocupes, yo te ayudaré, venga.
Akane volvía a mirarle sorprendida ¿podría ser que tuviese consideración hacia alguien? A lo mejor es que le gustaba Ryuko. Vio como el chico, con todo el cuidado y mimo, ayudaba a su amiga a bajar.
- Gracias Akira.
- ¡Ah! No hay de qué pero deberías haberlo dicho.
- Eso le digo siempre yo, no pasa nada por decir tus debilidades, la gente no es tan desconsiderada como parece.
- ¡Eso lo dices tú!
- Es lo que he comprobado, ni no dices lo que te avergüenza o da miedo, si tratas de ocultarlo, la gente te da cuenta y termina por burlarse de ti, pero, si lo declaras abiertamente, no pasada nada, te dirán "venga que te ayudo" "ánimo" y esas cosas.
Akane era una de esas personas que no sabe mentir, si algo no le gusta siempre lo hace saber, si algo le da miedo también, nunca pone excusas inventadas para nada y nunca se avergüenza de sus manías. Akira valoraba esa espontaneidad, como ayer, cuando le dijo claramente que no podían reunirse para lo de la obra ¿por qué? Porque había quedado con Sumire, así, clara y concisa, sin excusas, ni explicaciones retóricas... solo recordaba una vez en la que no hubo nada, ni sinceridad, ni explicaciones, ni diálogo... nada.
- ¡Eh, Romeo! - la voz de Akane desde el trastero le sacó de sus cavilaciones - ¿Me ayudas a mí también?
- ¿Necesitas ayuda?
- Seguro, soy bastante patosa ¿sabes? - Akira comenzó a subir las escaleras - Romeo, Romeo ¿dónde estás que no te veo? - dijo con voz trágica asomando la cabeza.
- Veras... Julieta - Akira adoptó un aire dramático - ¡Silencio! - su voz comenzó a sonar suave y algo eufórica a la vez - ¿Qué resplandor se abre paso a través de aquella ventana? ¡Es el oriente y Julieta el sol! ¡Surge, esplendente sol y mata a la envidiosa luna, lánguida y pálida de sentimiento, porque tú, su doncella, la has aventajado en hermosura!
- ¡Bien! ¡Bravo! - Ryuko daba palmas entusiasmada.
- ¡Oh, Romeo, Romeo! - respondió Akane a la improvisada escena - ¿Por qué eres tú Romeo? Niega a tu padre y rehúsa tu nombre, o si no quieres, júrame tan solo que me amas y yo dejaré de ser una Capuleto.
- ¡Fantástico! - Ryuko aplaudía cada vez con más euforia.
- Vaya, lo hacéis muy bien - dijo Kyojin, que llevaba rato mirando el espectáculo, aunque nadie se había percatado.
- ¿A que sí? Son geniales. Tal parecéis Romeo y Julieta.
- Es la tormenta - habló Akira que se había quedado a centímetros de la cabeza de Akane y ambos se miraban fijamente - Nos afecta a las conexiones neurológicas.
- Haced otra escena, anda, va...
- ¿Pero que dices? - gritó Akane - ¡Si no se más!
- Venga si - intervino Kyojin - Akira demuestra lo que vales.
- Adiós, adiós - de nuevo recitó Akane con voz dulzona - Triste es la ausencia y tan dulce la despedida, que no se como arrancarme de los hierros de esta ventana.
- ¡Que el sueño descanse en tus dulces ojos y la paz en tu alma! ¡Ojala fuera yo el sueño, ojala fuera yo la paz en que se duerme tu belleza!
Akane le miraba algo embobada.
- Carai con Romeo, si que tenía labia.
- ¡Ay, que me emociono! - decía Ryuko - Mira si hasta se me salen las lágrimas.
- Y eso que no han hecho la escena de la muerte - añadió Kyojin.
- Yo ya no sé más - dijo Akane - Así que se acabó. Te digo una cosa, Romeo: eres bueno, no lo pensaba de ti.
- ¿Y no os vais a besar? Esta escena merece un beso - propuso Kyojin.
- Vale, pero seguimos con el mismo problema - le ignoró Akane.
- Yo digo que vaciemos es baúl, la idea de Ryuko es buena - terció Akira.
- Claro - añadía Ryuko - Así pesará menos.
- Pero luego tendremos que recogerlo y vamos a perder mucho tiempo
- concluyó Akira - Pero claro, más tiempo estamos perdiendo hablando y pensando.
- Bueno pues si no hay otra idea, manos a la obra, Akira y yo lo iremos vaciando y os damos las cosas.
Entre charlas y discusiones sobre porqué no podían hacer Romeo y Julieta, vaciaron el baúl, no sin grandes esfuerzos lo bajaron y volvieron a meter los trajes y accesorios.
- ¡Terminamos! - exclamó Ryuko - Al final no hemos tardado tanto.
- Ahora hay que llevarlo al gimnasio - apuntó Akira.
- Pero podemos utilizar el ascensor - propuso Akane.
- ¿Pero funciona? - preguntó Kyojin.
- Claro, a nosotros no nos dejan utilizarlo pero yo he visto a algún profesor cogerlo.
- Ala, pues al ascensor.
El ascensor no era demasiado grande. El baúl cogía justito a lo ancho. Primero habían entrado Akira y Akane, luego el baúl, Kyojin y Ryuko ya no cogían.
- Bueno, nosotros bajamos por la escalera.
Kyojin pulsó el botón que indicaba el 0 y se apartó de la puerta, esta se cerró de forma sonora. El ascensor tardó unos instantes en comenzar un lento descenso.
- La verdad es que suena a cascajo - comentó Akane.
- A saber cuantos años tendrá.
- Muy rápido no es.
Los dos guardaron silencio, uno de esos silencios que suelen hacerse en los ascensores y que hacen que el tiempo se ralentice. De pronto la oscuridad mas absoluta se apoderó del pequeño espacio y bruscamente el ascensor se detuvo.
- ¡Vaya por dios! - exclamó Akane - ¡Que momento mas inoportuno!
- ¿Estás bien?
- Si... claro... esta es una situación incómoda.
Akira sacó un mechero de su bolsillo y lo encendió.
- ¿Se habrá ido la luz en todo el edificio? - preguntó Akane.
- Seguramente, pero no te preocupes la luz no tardará en volver.
- ¿Cómo lo sabes?
- Me imagino que un edificio como éste debe tener un generador de emergencia, algo automático.
La luz empezó a parpadear durante unos segundos hasta que se quedó encendida.
- ¿Ves? Ya está.
- Bien, ahora a bajar.
Akane pulsó el botón del ascensor pero este no se movió, tampoco la luz que indicaba que había sido pulsado lo hizo. Volvió a pulsarlo.
- Creo que tenemos un problema - dijo el chico.
- ¡Será por dios! - la chica pulsó varias veces más el botón y también los demás botones - ¡Maldita sea!
- Déjalo ya, no funciona, no te esfuerces.
- ¿Cómo puedes estar tan tranquilo?
- ¿Y que quieres que haga?
- No se, tu eres la mente superior ¿no?
- ¡Ah! - se quejó Akira y con desgana pulsó el botón de alarma - Ya está.
Akane se sintió algo avergonzada.
- ¿Crees que funcionará?
- Supongo, pero no te preocupes Kyojin y Ryuko harán algo ¿no?
- ¿Por qué no nos contestan?
- ¿Te pone nerviosa esta situación?
- Pues si, no lo voy a negar. Los sitios pequeños no me gustan, no puedo moverme, me agobian.
- Será mejor que nos pongamos cómodos.
Akira consiguió pasar por encima del baúl para situarse en el otro lado, allí empujó un poco el baúl hacia Akane que ya ni cogía.
- Ven, aquí estaremos mejor.
Akane también paso por encima del baúl y ya en el otro lado, ambos terminaron de pegar el baúl a la pared. Akira se sentó en él.
- Ha llamado al servicio técnico de urgencias de mantenimiento, buenas tardes.
Una voz hueca se oyó retumbando por el pequeño espacio.
- ¡Ah, por fin! - exclamó Akane - Hola, hola.
- Hola ¿Algún problema?
- Si, estamos encerrados en un ascensor.
- De acuerdo, sobretodo no se preocupen, ahora tomo aviso ¿Cuántos son?
- Somos dos.
- Y un baúl - añadió Akira - Que ocupa lo suyo.
- ¿El ascensor de que tipo es?
- ¿Qué que tipo...? Es un ascensor normal, bastante pequeño, la verdad.
- Bueno ante todo conserven la calma ¿Dónde está situado el ascensor?
- En el Instituto de Kizuna.
- ¿En el Instituto? ¿No será una broma?
- Señorita, por favor, no es una broma, estamos en el Instituto que está vacío.
- ¿Y que hacen en el Instituto?
- ¡Y que más da! - gritó Akane - A ver somos dos adolescentes encerrados en un ascensor, hace calor y me está empezando a dar un agobio tremendo, haga el favor de avisar para que nos saquen.
- Vamos a ver, tranquilidad. Tengo que asegurarme de que no es una broma.
- ¿No pueden llamar a la directora del Instituto? - propuso Akira.
- Si, tenemos un número de contacto.
- ¡Pues llámela! - de nuevo gritó Akane - Ella le confirmará que teníamos permiso y de paso dígale que no me hago responsable de mis actos.
- Bueno, voy a contactar con ella pero vamos a relajarnos ¿vale?
Se oyó como se interrumpía la comunicación.
- ¿Tú crees que nos sacarán de aquí, Akira?
- No les queda otro remedio, si nos morimos aquí les va a caer una buena.
- ¿Nos podemos morir?
- Era solo un decir.
- ¿Se nos va a acabar el aire?
- No te preocupes, no está cerrado herméticamente.
- ¿Pero nos podemos quedar sin aire?
- Hombre, puede que dentro de varias horas se enviciase un poco. Venga, no te preocupes que nos sacan enseguida. Lo que no imaginaba era que fueses claustrofóbica.
- ¿Y que quieres que te diga? A mi no me gustan los lugares pequeños, a Ryuko no le gustan las altura, a Jisei las arañas y a ti no te gustan las mujeres y te ha tocado quedarte encerrado con una histérica, fíjate tú, la vida es muy injusta.
- Yo no he dicho que no me gusten las mujeres.
- No, solo que no nos aguantas. Carai ¡que calor hace! Espero no sudar demasiado.
- Anda, siéntate aquí y haz caso a lo que te han dicho, relájate.
Akane se sentó de mala gana.
- Y no te preocupes, de momento hueles bien.
- ¡Idiota!
- Procura pensar en algo... no sé, agradable, algo que te haga olvidar que estas aquí.
- ¿Y cómo voy a olvidar que estoy aquí si estoy aquí? Espera... levanta, levanta.
Ambos se levantaron, Akane abrió un poco el baúl y metió la mano. Rebuscó y sacó triunfante el libreto que había metido allí.
- ¡Aquí está! Bien, lo leeré, creo que así me distraeré.

1 comentarios:

Apple Ninde dijo...

Otroo capi que no lei!..... gosh cuantos capis no he leido? :s
tendre que reeleerlo dsd el principio!